Si yo fuera Rodolfo…
Si yo fuera Rodolfo, conociendo cómo fue la votación en nuestra ciudad, me dirigiría a los barranquilleros y les diría: Desde el inicio de mi gobierno gestionaré todo lo necesario para destrabar con el departamento del Magdalena la ampliación a doble calzada de la carretera a Ciénaga, garantizando su construcción total antes de terminar el tercer año de mi mandato, y de manera simultánea la terminación de la variante de Ciénaga y su continuación hasta el peaje de Tasajera. Si yo fuera Rodolfo, también anunciaría que destrabará la ampliación de la autopista a Cartagena, garantizando que estará lista, totalmente con su doble calzada entre las dos ciudades, antes de finalizar su mandato, y que no inaugurará tramitos de 7 kilómetros, sino la vía completa. Con ese par de anuncios, el ingeniero, como acostumbran llamarlo, lograría una gran cantidad de nuevos votos quilleros que serían definitivos para sus aspiraciones, pero también para que tengamos argumentos para exigirle.
Si yo fuera Rodolfo, haciendo eco a su lema “Lógica, Ética y Estética”, les manifestaría a los habitantes de esta ciudad que resolverá a la mayor brevedad lo relacionado con el aeropuerto Ernesto Cortissoz, rediseñando todo lo que sea posible para que la ciudad cuente con una terminal de pasajeros como la que se merece. Obra que debería estar lista durante su primer año de gobierno. Suponiendo yo, que como ingeniero civil que es, este tipo de proyectos debería generarle una enorme satisfacción, sobre todo porque podría pasar a la historia como el gran presidente que logró cumplirle a Barranquilla y al Atlántico como ninguno anterior.
Si yo fuera Rodolfo anunciaría el proyecto y construcción durante su mandato de un nuevo distrito de riego para la zona oriental del Atlántico, incluyendo los municipios de Sabanagrande, Santo Tomás y Palmar de Varela, bombeando agua del río Magdalena para garantizar un enorme distrito agrícola con agua durante los 12 meses del año, en las goteras de Barranquilla. Si yo fuera Rodolfo, anunciaría que dará inicio a la mayor brevedad a un estudio y diseño del necesario puente entre Puerto Giraldo, en el Atlántico, y Salamina, en el Magdalena, y de la transversal desde nuestra carretera Oriental y la Ruta del Sol cerca de Fundación, para agilizar el tráfico pesado hacia y desde el interior del país.
Si yo fuese Rodolfo me reuniría con verdaderos conocedores del río Magdalena, y anunciaría que hará todo lo que esté a su alcance, que será mucho como presidente, para llevar la navegación fluvial de carga desde Barranquilla hasta Puerto Salgar, en Cundinamarca, y La Dorada en Caldas, incluyendo todos los puertos intermedios, para dinamizar decenas de municipios ribereños, y que reestructurará a Cormagdalena para que se convierta en un organismo autónomo y con músculo financiero suficiente para atender los requerimientos de esa arteria fluvial.
Si yo fuera Rodolfo anunciaría también que desde antes de su posesión se reunirá con el director del Banco de la República a solicitarle seriedad y celeridad en lo que corresponde al teatro Amira de la Rosa, y que estará pendiente personalmente de esa gestión. Pero para que Rodolfo pueda ofrecernos todo lo anterior se requiere que nuestros dirigentes se lo soliciten, le demuestren la urgencia de todos y le presenten proyectos. ¿Seremos capaces?