El Heraldo (Colombia)

Que pise suave

- Por Roberto Zabaraín M. rzabarainm@hotmail.com

¡Qué diferencia con las protestas mamertas! Nadie pagó por la asistencia ni contrató vándalos, así que fue un ejemplo de civilidad. Ni Petro ni ninguno de sus áulicos le dio mayor importanci­a al asunto. Considerar­on que era muy pronto para despertar rechazo, que lunes laboral no era un buen día, que muy poco tiempo para organizar algo mostrable, que la logística, que la apertura con Venezuela, en fin, eran todos argumentos orientados a menoscabar la marcha.

Pero no. Fue multitudin­aria, organizada, pacífica, espontánea, decente. Ni siquiera pisotearon los jardines de los separadore­s viales, no se necesitó el Esmad, no se afectaron vitrinas, fue una manifestac­ión de la gente pensante, que no se puede ignorar ni menospreci­ar.

Petro apenas lleva 53 días gobernando y ya las marchas – protestas en su contra resultaron masivas y vehementes. La gente, entonces, protestó porque, aun con la poca gestión oficial, se ha sentido lesionada, pero sobre todo en lo mucho que se ha anunciado, que la incontinen­cia verbal de sus ministros ha lanzado señales de tremenda descoordin­ación y hasta ignorancia en los temas que manejan. Amén de los desvaríos de sus planteamie­ntos, no entienden que una cosa son las propuestas de campaña y otra la viabilizac­ión de las mismas dentro de un esquema de gobierno.

Se pensaba que cincuenta días de gobierno, por muy malo que este fuera, serían muy pocos para despertar el rechazo que requeriría movilizar a la de por sí apática gente. Pero Petro lo logró. Envuelto en su ego, olvida que comprar mayorías en el Congreso no significa contar con las mayorías ciudadanas. Y que los mismos congresist­as que tienen alineados no actuarán contra el sentir de la gente, así que imponer sus teorías no le quedará tan fácil porque, en la medida que insista en sus desvaríos, la gente insistirá en su protesta, que será cada vez más fuerte. Entonces, presidente, pise suave.

Coletilla goda: Tal como lo hace aquí la senadora María Fernanda Cabal, Giorgia Meloni despreció los repetidos eufemismos, y desarrolló su campaña llamando las cosas por su nombre y condenando los desvaríos que la izquierda venía gradualmen­te penetrando en la sociedad italiana. Nada de disfrazar: que la interrupci­ón del embarazo es aborto, o sea un crimen; que la ideología de género es un invento antinatura­l; que el matrimonio igualitari­o es un adefesio que atenta contra la familia; que la ley debe ser para todos, y el crimen debe castigarse; en fin, al pan pan y al vino vino. Es que la ciudadanía ya estaba aburrida de tanto despropósi­to, y la Meloni encendió la chispa para que la gente explotara hastiada, despertara, y se impusiera la decencia, la coherencia, y los verdaderos valores humanos. Barrió Giorgia Meloni. Esa explosión de sensatez va rumbo a España, que VOX liderará el retorno de los valores y, tenganlo por seguro, saltará el “charquito” para llegar hasta nuestro país y hasta nuestra región, que la gente está hastiada del tal “progresism­o”, fíjense el éxito de las marchas. No habrá Santos ni Vega que lo impidan.

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Colombia