ADOLFO PACHECO ANILLO (QEPD)
Con el fallecimiento del maestro Adolfo Pacheco Anillo pierde el país a uno de los mas prolí cos compositores y quizás el ultimo juglar del más puro folclor nacional. Y sin lugar a duda, el mas alto exponente del vallenato sabanero.
Auténtico, pero ilustrado, se tituló como abogado de la Universidad de Cartagena, e hizo de su natal San Jacinto un referente musical de la región Caribe.
Lamentable pérdida para el folclor y la academia, que para estos días presentaría su autobiogra ía y le otorgaría un doctorado Honoris Causa a través de la Universidad Simón Bolívar, la institución que consideraba su segunda morada.
Se nos va un hombre bueno, curtido de la sabiduría que derrochan nuestros campesinos, el mismo que nos enseñó a valorar la importancia de los mochuelos de un tal Joche en los Montes de María; el que evitó con ictos provinciales regalando al valle cofres de plata y hamacas para el romántico descanso de Enrique y Rosalbina; el mismo que le apostó al cordobés con la fe ciega de un gallero empedernido, y que exhortó a su padre (el viejo Miguel) a que volviera a su pueblo sencillamente porque “la ciudad es ingrata con el provinciano y porque todavía le quedan amigos en el pueblo donde el forastero incluso pregunta por su persona. Y porque con la picardía de su alegre temperamento se llevo a Mercedes a pasear en coche por las estrechas calles de Cartagena para terminar haciendo un nido de amor en el legendario Hotel Caribe”.
Paz en la tumba del más grande sociólogo del vallenato. El trasegar de su vida nos servirá como ejemplo de filantropía, honestidad y gallardía. A estas horas, muy seguramente ya estará Leandro conversando con Escalona, con Durán y Juancho Polo, para recibirlo con los honores del parrandero que faltaba en las celestiales veladas de acordeón y gaitas amenizadas por Colacho, Fernández y Landero. Y donde papá Dios, como testigo, funge como jefe de aplausos y hasta se encarga de animar con los consabidos ¡Apá!
Coincidencia o casualidad: ¡APÁ! Son las iniciales de Adolfo Pacheco Anillo; un amigo como pocos que deja grabado su nombre en la dura piedra del patrimonio inmaterial colombiano.
IGNACIO CONSUEGRA BOLÍVAR