EL ARROLLADOR ENCANTO DE Jude Law
EN ANIMALES FANTÁSTICOS 2: LOS CRÍMENES DE GRINDELWALD INTERPRETA A QUIEN LUEGO SE CONVERTIRÁ EN EL MAGO MÁS PODEROSO DEL UNIVERSO DE J. K. ROWLING. ENTREVISTA CON EL ACTOR BRITÁNICO.
EN LA HABITACIÓN 332 del fastuoso Hotel Rosewood London, ubicado en la calle High Holborn de la capital británica, entramos prácticamente a ciegas. Nuestro encuentro con Jude Law tiene un tema específico: conversar sobre Animales fantásticos 2: los crímenes de Grindelwald, dirigida por David Yates y escrita por la creadora de la saga Harry Potter, J. K. Rowling. Sin embargo, vamos a tientas.
La ceguera es metafórica y, además, compartida. Law no puede dar muchos detalles de la película y a quien escribe le piden tener paciencia hasta noviembre, fecha en que se estrenará mundialmente la secuela de las aventuras del magizoólogo Newt Scamander (interpretado por Eddie Redmayne).
“Es bastante oscura…”, pone cara de pícaro Jude Law, quien encarna a Albus Dumbledore, uno de los personajes clave en la cinta, que es la precuela de Harry Potter, y a quien en su vejez se le conoce como el mago más poderoso, enemigo acérrimo de malos como Grindelwald o Lord Voldemort, además de ser el director del Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería.
Junto a Eddie Redmayne, Katherine Waterston (como Porpentina ‘Tina’ Goldstein), Johnny Depp (interpretando al temible Grindelwald), Zoë Kravitz (como Leta Lestrange), Ezra Miller (como Credence Barebone), entre muchos otros actores, el bronceado y afable Jude Law alaba la atmósfera del rodaje y a sus compañeros, con quienes logró conformar una especie de gran familia cinematográfica.
Gracias al arrollador encanto del actor, la sensación de ceguera poco a poco se diluirá y aumentarán las ganas de verle como Dumbledore en la segunda entrega de Animales fantásticos. Así que, un poco de paciencia.
“TENÍA UNA GRAN PRESIÓN Y RESPONSABILIDAD PORQUE QUIENES habían encarnado a Dumbledore en el pasado son grandes actores; sin embargo, me sentí libre al interpretarlo en una fase más temprana de su vida”.
_ Al parecer le ha dado un esperado toque sexy al joven Albus Dumbledore…
Jude Law (J. L.): (Se ríe) ¡Bastante joven a mis 45 años y a pesar de estar perdiendo el pelo! Cierto: es que no tengo 100 años.
_ Más allá de su aspecto físico, ¿qué percepción tiene de Dumbledore?
J. L.: No quiero revelar mucho, pero tengo la impresión de que de alguna manera se siente aislado y está precisamente en ese momento en el que debe confiar en alguien. Se encuentra en un instante crucial de su vida, ya que para salir adelante tendrá que tomar las decisiones correctas, enfrentarse a sus demonios del pasado y hallar una manera de solventar sus errores. Se ve también en la situación de tener que apoyarse en otras personas que crean en su causa. Sin duda, es un hombre muy complejo pero, tal como se menciona en todos los libros de J. K. Rowling, posee esa maravillosa cualidad de ser chispeante y travieso, lo cual resulta encantador. Pienso que Dumbledore posee una picardía –si se quiere– volátil, y desde mi punto de vista de actor, lo que he procurado es liberarlo de gravedad, que no resulte pesado.
_ Se ha especulado mucho sobre la orientación sexual de Dumbledore, develada por la misma J. K. Rowling. ¿Ha sido un aspecto decisivo a la hora de interpretarlo?
J. L.: Los deseos de Dumbledore son bastante específicos y en realidad su