Néstor Pongutá y el Papa Francisco
El periodista radicado en el Vaticano publicó un libro que da claves para entender la compleja personalidad del sumo pontífice y sus esfuerzos para reformar la Iglesia. Pongutá, reportero en 15 viajes de los últimos papas, hace la radiografía de un hombre
El solo título dél libro Un tinto con el papa Francisco, dél périodista colombiano Néstor Pongutá con prólogo dé Julio Sánchéz Cristo, sugiére que las 300 páginas son el perfil humano de un pérsonajé carismático, comunicador y Éncantador dé multitudés, qué insisté Én transgrédir las normas protocolarias dél Vaticano. Pongutá, con más dé 20 años como réportéro Én la Santa SÉDÉ É invitado préféréncial a 15 viajés dé los últimos trés papas, rélató aspéctos dé la vida dé Jorgé Mario Bérgoglio a partir dé algunos dé los contertulios del sumo pontífice. Varios lo acompañaban a tomarsé un café cuando vivía Én Él barrio Las flores, de Buenos Aires.
Por supuésto, Él téxto tiéné rélatos Én priméra pérsona, dél propio Néstor Pongutá, gracias a sus privilégios como pasajéro dél avión papal, qué lo llévó hasta Él Santuario dé Fátima y Él campo dé concentración de Auschwitz, entre otros lugares. Duranté Éstos récorridos sé Éntéró dé las llamadas qué hacé Francisco cada domingo para hablar con sus amigos portéños.
Un tinto con el papa Francisco És algo más qué un compilado dé anécdotas, también És un documénto histórico qué révéla détallés dél papél siléncioso qué tuvo Él santo padré Én Él procéso dé paz colombiano, y su Ésfuérzo por buscar una intérsécción Éntré las fuérzas políticas dé Juan Manuél Santos y Álvaro Uribé.
¿Qué lo cautáva de Francásco? –Su compléja séncilléz qué sé Évidénció désdé Él moménto Én qué fué Élégido, cuando aparéció Én la Logia las Béndicionés, véstido dé blanco, sin ornaméntos, saludando con un simplé “buénas tardés” y luégo pidió rézar por él sin autodénominarsé Papa sino Él obispo dé Roma. Démostraba qué había llégado un hombré Éspécial qué quiso pagar dé su bolsillo la résidéncia dondé sé había quédado, réchazó la limusina papal y Éscogió un Ford Focus azul usado qué lé parécía más acordé y práctico. Pérsonalménté llamó a quién lé véndía los diarios para cancélar la suscripción arguméntando qué lo habían nombrado Papa y no podía régrésar.
¿POR SU CARISMA Y FIGURACIÓN MEDIÁTICA puede compararse a guan Pablo ff? –Ambos son grandés comunicadorés, solo qué proviénén dé tiémpos, réalidadés y paísés diféréntés. El carisma dé Karol Wojtyla ténía qué vér con su manéra dé désénvolvérsé. Récordémos qué vénía dél téatro y Éra un actor acostumbrado a ténér contacto con Él público péro qué también padéció la Ségunda Guérra Mundial y Él comunismo. Por su parté, Jorgé Bérgoglio vivió una dictadura, sufrió pérsécucionés y aislamiéntos. Su familia débió salir dé Italia buscando nuévas oportunidadés. Por Éso És sénsiblé frénté al téma dé los inmigrantés.
¿Cree que ha hecho cambáos estructuraLES EN LA IGLESIA O SIMPLEMENTE PINTÓ LA Fachada? –Cambiar una institución dé más dé 21 siglos no És una taréa fácil. El papa Francisco lo Éstá haciéndo. DÉSDÉ su nombramiénto Éscogió un grupo dé cardénalés dé todos los continéntés para qué lo asésorén Én Ésa taréa. Está convéncido dé qué la réforma no puédé sér ni Éstética ni superficial. Él busca que en las jerarquías católicas brillén más las idéas qué los ornaméntos.
¿Siente que este Papa genera incomodidad en el interior del Vaticano? –Él sigue avanzando con las reformas para que sea una Iglesia pobre para los pobres. Pero aunque parezca increíble esto le ha generado mucha oposición dentro de la misma curia romana y en algunos tradicionalistas que no ven con buenos ojos esos cambios. Imagínese qué piensan esos altos prelados o diplomáticos en el Vaticano que viven rodeados de servidumbre en apartamentos hasta de 700 metros cuadrados y que, desde sus suntuosos automóviles último modelo de vidrios oscuros, dicen que sienten la pobreza en el mundo. La gente está cansada de esa falta de compromiso y por eso ven con mejores ojos a este Papa latinoamericano, el vicario de Cristo, el líder espiritual de más de 1.200 millones de personas.
Dicen que es el Papa negro del apocalipsis o el falso Papa. ¿Qué piensa? –En cualquier ámbito se ve normal que cuando no se puede con los argumentos se acude a las descalificaciones. Entre los opositores del Papa hay un grupo de ultraconservadores que no toleran esa nueva manera de guiar la Iglesia del papa Francisco. Jorge Bergoglio es el primer jesuita que llega al solio de Pedro. Pero las prioridades ahora han cambiado y los que se ven afectados buscan disociar y crear leyendas falsas en torno a este Papa porque no soportan que le caiga bien no solo a los católicos.
José Galat en su programa de Teleamiga dijo “que era un hereje”. –Busca visibilidad y ganar audiencia a través de calumnias y exageraciones y aunque tiene algunos adeptos cada vez son menos los incautos. Tratar de generar polémicas o de criticarlo puede ser normal pero denominarlo como el antipapa, el falso profeta o el anticristo se convierte en un absurdo que se cae por su propio peso.
¿Hacia dónde se inclinan las ideas políticas del Papa? “El Papa es también un jefe de Estado, pero es un error verlo solo desde el punto de vista político. Es un validador moral, un líder religioso por donde pasan todos los mandatarios. El Papa no puede ser calificado de derecha o de izquierda. No tendría sentido que solo trabajara en función de una sola tendencia ideológica. Así como se reúne con Castro, de Cuba; o Maduro, de Venezuela, también lo hace con el presidente Trump y con Vladimir Putin. En el libro hago una comparación con su buen amigo, el expresidente de Uruguay José Pepe Mujica, con quien tienen estilos parecidos a pesar de que Mujica es un ateo declarado y reconocido. Bergoglio nunca se fijó en eso, solo le interesó que era buena persona.
¿Qué perfiles DEBEN tener Los periodistas que viajan con su santidad? –Mi primer viaje papal lo pude realizar en mayo de 2007 hace más de diez años a Brasil con Benedicto XVI, pero tuve que pasar siete años siguiendo la fuente, especializándome y estudiando para poder ser admitido. Así como es difícil ganarse un lugar en el avión del Papa igual de fácil es perderlo. Por eso cada día es un reto y exige mucha preparación, prudencia, tacto y profesionalismo.
¿Cuál ha sido el Papa más cálido? –A todos los veo como unas personas muy especiales. Juan Pablo II era muy tranquilo, muy amigable y de buen humor. En la época que llevaba bastón había
El libro recordó que Jorge Bergoglio estuvo en Colombia en 1970, cuando tenía 33 años.
una fuerte crisis de esas que azotan a la Iglesia católica. Un periodista muy agudo le preguntó: “¿Es verdad que usted se sostiene como Papa gracias a ese bastón?”. Juan Pablo II le respondió: “Puede ser que usted esté en lo cierto, pero la verdad también me debería servir para darles en la cabeza a los que preguntan impertinencias”.
Benedicto XVI no fue tan carismático. ¿Por qué? –Quizá el obstáculo más grande que tuvo Benedicto XVI para afianzar una imagen más amable fue reemplazar a Juan Pablo II, considerado el Papa grande. El mismo Ratzinger sabía que tenía una gran sombra encima pero en ningún momento trató de emularlo. Sin embargo, recordemos que en los últimos años de Juan Pablo II, que fue prácticamente una agonía en directo, ni siquiera era el Papa polaco quien pronunciaba los discursos y muchos decían que tampoco gobernaba. Había muchas intrigas y crisis en la Iglesia católica. Por eso Benedicto XVI tuvo que enfrentar una etapa de transición muy difícil y la prensa fue implacable con él. Pienso que gran parte de lo que ha logrado el papa Francisco es gracias al camino que comenzó a trazarle el Papa alemán.
Su libro está cargado de anécdotas del papa Francisco. Cuéntenos una. –Por ejemplo recuerdo cuando íbamos hacia República Centroafricana, uno de los países más convulsionados por el enfrentamiento entre musulmanes y cristianos. Francia, que tiene el control en ese país, dijo que no podía garantizar la seguridad del papa Francisco, sin embargo él siguió adelante. Los periodistas estábamos muy preocupados y en medio del vuelo hacia el continente negro uno de nosotros le preguntó: “Santidad, ¿usted tiene miedo por este viaje?”. Jorge Bergoglio hizo cara de angustia, cerró los ojos, se tomó sus manos como si fuera a orar y dijo: “La verdad sí tengo miedo, tengo mucho temor de los mosquitos y lo único que les puedo recomendar es que usen repelente”. Así de simple rompió la tensión.
¿El Papa interactúa con los periodistas que van en el avión papal? –Cuando vamos en un viaje papal nos agradece por acompañarlo, nos desea buen trabajo y a cada uno nos dedica unos minutos. Si se entera de que alguno está de cumpleaños le manda a hacer la torta y participa de la celebración.
Mitos y leyendas que rodean a Francisco. ¿Le prueban la comida para evitar que sea envenenado? –Aunque las medidas de seguridad y la gendarmería vaticana son de las más estrictas del mundo, no le prueban la comida, eso es un mito. De hecho cuando va en su papamóvil por la plaza de San Pedro y ve a un argentino tomando mate, no tiene ningún inconveniente en pedirle un poco y ni siquiera limpia el pitillo, antes de beberlo.
Un tinto con el papa Francisco entrega datos inéditos del encuentro entre Juan Manuel Santos y Álvaro Uribe en elvaticano.