KEVIN SPACEY. ESPLENDOR Y CAÍDA DE UN ACOSADOR EN SERIE.
Ni las disculpas ni salir del clóset como gay han atajado en Hollywood el repudio al protagonista de la serie House of Cards, acusado de abusos sexuales por más de 15 hombres.
El protagonista de House of Cards enfrenta el repudio de Hollywood a pesar de sus disculpas.
En junio,cuando
nadie sospechaba la tormenta que se venía encima, Kevin bromeó con la expresión “en el clóset”, lo que remitía al viejo rumor de que él era gay. Esa noche en que presentaba los premios Tony en Nueva York, fue una de las últimas en que gozó de los encantos de poseer una de las carreras más brillantes de Hollywood, con dos premios Óscar en su palmarés y el estatus de verdadera institución en el cine, el teatro y del boom de las series de televisión, al protagonizar una de las más exitosas, House of Cards.
Su gloria hoy está hecha trizas porque Spacey cayó en la avalancha de denuncias de acoso sexual que estremece a la meca del séptimo arte, tras el embrollo del productor Harvey Weinstein. Después de él, Spacey es quizá el pez más gordo puesto en evidencia, luego de que el actor Anthony Rapp, actor de Star Trek: Discovery, le revelara al portal Buzzfeed que en 1986, a sus 14 años, la estrella lo invitó a su casa a una fiesta, en medio de la cual prefirió ver televisión en la habitación del an-
fitrión. Al parecer borracho, Spacey, a quien conoció trabajando en un teatro de Broadway, se lanzó sobre él en la cama, pero logró zafarse.
“Si me comporté como él lo describe, le debo una sincera disculpa por lo que debió ser un comportamiento bajo los efectos del alcohol (...). Como todos los cercanos a mí lo saben, he tenido relaciones con hombres y mujeres. He amado y tenido encuentros románticos con hombres toda mi vida y ahora escojo vivir como gay”. Tal fue la respuesta de Kevin a la denuncia, considerada una de las peores declaraciones que se hayan visto por expertos como Danny Deraney, publicista y especialista en crisis de Hollywood.
La comunidad LGBT afirmó que Spacey la perjudicaba, pues la asociación que hace de ser gay con acoso sexual y pedofilia le echa más sal a un viejo estigma. Otros opinaron que salir del clóset fue una maniobra para desviar la atención sobre un delito sexual contra un niño.
El efecto más contundente del episodio fue el modo en que otros acusadores de Kevin hablaron tras años de silencio. El director Tony Montana recordó que en 2003 estaba con él en un bar cuando “me agarró todo el ‘paquete”’. Por su parte, el actor mexicano Roberto Cavazos mencionó en Facebook “un par de encuentros desagradables con Spacey que rayaron en lo que se podría llamar acoso”, cuando trabajaban en el teatro Old Vic, en Londres.
Daniel Beal asegura que en 2010, cuando tenía 19 años y era cantinero de un bar en West Sussex, Inglaterra, Kevin, ebrio, le mostró el pene. “Es grande, ¿no?”, le dijo, y trató de poner la mano de Beal en él. Tras el rechazo del barman, quiso comprar su silencio con su reloj IWC Portofino, de 6.500 dólares.
Harrydreyfuss,hijodelactorricharddreyfuss, narró en Buzzfeed que en 2008, cuando tenía 18 años, Kevin fue a su casa para leer un guion con su padre y que él se les unió. Aprovechando que estaba sentado en el mismo sofá, Spacey empezó a acariciarle el muslo hasta llegar a los genitales. Richard estaba tan concentrado en el texto que solo lo supo años después, cuando Harry se lo contó.
Otra supuesta víctima es Andy Holtzman, quien señala al actor de habérsele abalanzado en su oficina del programa Shakespeare in the Park, mientras que The Vulture corroboró la historia de un actor estadounidense anónimo, exalumno de Kevin, que asegura que a los 14 años tuvo un
La imagen de pedófilo y depredador sexual le costó a Kevin la candidatura al Óscar y que Ridley Scott lo echara de su cinta All the Money in theworld.
affaire sexual con él a mediados de los ochenta. Terminada la aventura, pasó un día por el apartamento de Kevin, quien trató de violarlo.
La presentadora Heather Unruh denuncia que él se propasó con su hijo y sus compañeros de House of Cards, de la cual también es productor ejecutivo, aseguran que él hizo del ambiente de trabajo algo tóxico por su tendencia a toquetear a los hombres. Específicamente, ocho excolaboradores del programa delatan que los asaltó sexualmente. Y en Londres, Scotland Yard investiga otro caso de abuso contra un joven que involucra al artista, quien ha perdido varios papeles, su agente, su jefe de prensa y su prestigio por el escándalo.
“No sé si Spacey vuelva a trabajar tras todo esto. No puedo imaginarlo”, anotó el publicista Deraney. Karen Kessler, otra experta en manejo de crisis, cree que recuperar una carrera es más probable en Hollywood que en la política. “No va a ser mañana que vuelva a ser protagonista en Broadway, pero la siguiente cosa que se sabrá es que está de regreso”, le declaró a Amy Kuperinsky
Nj.com.• del portal