maría alejandra díaz
Perfil:
Regresar a Cúcuta no estaba entre sus planes, sin embargo hoy se siente feliz aquí. Desde que María Alejandra Díaz Ramírez se graduó del colegio Santa Teresa partió de la ciudad a estudiar psicología en la Pontificia Universidad Javeriana, en Bogotá, y posteriormente cursó una especialización en administración de empresas y negocios en la misma institución.
Luego se radicó en Cali por 10 años, mientras trabajaba en la empresa Carvajal, labor que dejó a atrás para viajar a Inglaterra y residir allí durante tres años.
“Cuando regresé a Colombia no quería venir a Cúcuta, porque hacía mucho me había ido y no sabía cómo estaba. Sin embargo, regresé y vi que está completamente diferente, además que mi familia está aquí, entonces me siento feliz”.
El motivo de su regreso fue por su nuevo trabajo como directora de la multinacional de idiomas Berlitz que lleva 40 años en el país y 137 en el mundo, con presencia en 70 países. Responsabilidad que asumió en las sedes de Cúcuta y Bucaramanga.
“Esta es una alianza con la Cámara de Comercio de Cúcuta. Ellos nos trajeron para desarrollar el programa de bilingüismo del departamento y estoy muy contenta viviendo de nuevo aquí, porque de una manera u otra le estoy aportando a la ciudad. Es solo un granito de arena para que Cúcuta se vuelva más competitiva, innovadora y más atractiva”.
Por su trabajo y porque le encanta lucir siempre radiante, María Alejandra se viste con mucho estilo, considerando que su presentación personal es un factor clave para sus labores. “Yo trabajo visitando muchos clientes y por eso me gusta estar bien presentada”.
“Me gusta ser formal, pero casual a la vez. Soy una persona descomplicada y me gusta estar con ropa fresca. Amo las faldas largas, me encantan los pantalones anchos (que parecen faldas), y especialmente todas las prendas que tengan texturas finas”.
La cultura india es una de sus influencias a la hora de vestir. “Cuando viví en Londres estaba muy cerca con todo el tema de la India y ese estilo para vestir me encantó; además de que adoro esa cultura. Todo lo que pueda comprar de la India, siempre y cuando me guste, lo hago”.
Si de colores se trata, sus preferidos son los tonos oscuros, sin que falte el tradicional negro. “Creo que el 60 % de mi ropa es negra, porque me fascina”.
La cucuteña confesó que no se lleva muy bien con los fosforescentes. “Los tonos tipo ‘neón’ en definitiva no son para mí. Nunca usaría tampoco algo en azul celeste o cielo”.
Otra de las prendas que no usaría son blusas con brillos ni errajes y tampoco sandalias romanas. En el calzado le gusta variar, dependiendo de las circunstancias en que se encuentre, por ejemplo en un día de trabajo opta por los tacones, mientras los fines de semana prefiere tenis o sandalias bajas.
Un vestido como esté es perfecto para salir ‘de rumba’ o simplemente para estar con sus amigos compartiendo en un bar. Si es un evento más formal no duda en usar un buen conjunto que la haga sentir aún más elegante y sofisticada.
Vestido: Jane Norman
Zapatos: Zara
Accesorios: Moma
cibir de forma detallada el mundo y formar imágenes mentales de los objetos, habilidades resaltadas por Lutz Jäncke, profesor del Instituto Tecnológico de Zúrich (Suiza) en su investigación académica sobre los instrumentos musicales publicada en la revista Journal of Neuroscience.
En la Fundación Artística Cultural (Fundarte) también enseñan a tocar.
Allí los instructores reciben a niños y adultos interesados en aprender piano, guitarra clásica y eléctrica, saxofón, flauta dulce, entre otras más. El profesor Hernando Rojas, formado en orquesta sinfónica, asegura que cualquiera puede educarse en materia musical, solo necesita las ganas, el entusiasmo y la disposición.
Él recomienda que los ejercicios se prolonguen de dos a cuatro veces por semana para que el ejecutante pueda ver resultados. Y trae un refrán a la conversación: ‘La práctica hace al maestro’.