Tatiana Forero
Serenidad y buena energía. Eso es lo que transmite Tatiana Forero Forero. Lo mismo sucede con su spa y centro de bienestar que lleva su mismo nombre; un lugar que brinda ese “mantra” para ofrecer, además de trata- mientos estéticos, tranquilidad emocional a los pacientes.
El tema del desarrollo del ser le apasiona tanto, que en su lugar de trabajo no faltan los libros de motivación personal, como tampoco aquellos de temática psicológica. Tatiana, bogotana de nacimiento, es profesional en sicología de la Universidad Autónoma de Bucaramanga y tiene estudios en estética facial y corporal. Como promotora del bienestar físico, Tatiana practica el triatlón. El próximo 29 de septiembre participará en el ‘Ironman Cozumel’ que se realizará en México. Se trata de la prueba más exigente de esta práctica que consta de tres carreras: natación, ciclismo y trote en un tiempo límite.
También confesó ser una enamorada de la vida y de su familia: su esposo, con quien lleva 11 años de noviazgo y cuatro de matrimonio; los hijos de su pareja y su pequeña hija de tres años, Aisha Mustafá, fruto de esa relación.
“Me siento muy feliz porque tengo lo que siempre he soñado: una estabilidad y una tranquilidad única que no me lo quita ni me lo roba nadie, una familia hermosa y un esposo que me ama”, aseguró la empresaria de 34 años.
Su lugar
La oficina es el lugar predilecto de Tatiana Forero. Este se caracteriza por su comodidad y los tonos neutros como el blanco, gris, café y dorado que le brindan serenidad.
Además de asesorar a sus pacientes, allí cumple otras actividades como la lectura y programa las tareas de sus otros nego-
cios: restaurantes y tienda de ropa.
“No estoy allí permanentemente porque a veces hago visitas empresariales o tenemos spa móviles, pero pienso que la oficina es donde más se desarrollan diferentes actividades que van encaminadas a todo lo que uno hace en su día a día. Me gusta porque tengo todo al alcance, la ambiento a mi manera, tengo mis libros y mis productos”.
Sobre la decoración asegura que fue obra suya. “Soy bastante meticulosa y creo que también tengo algo de arquitecta o de ingeniería porque distribuyo bien los espacios”.