Idea de maestros: los del 2277 + los del 1278
El sindicato Fecode dice que busca dignificar la profesión docente con aspectos como salarios, sistema de ascensos y retiros. Pruebas.
En Colombia los docentes trabajan en regímenes diferentes. Uno es el 2277, que incluye a 126 mil, que ingresaron al magisterio antes del 2022. Y el otro es el 1278, que corresponde a 130 mil 185 que comenzaron de ese año en adelante. El escalafón y el salario es diferente para ambos. Lo que buscan ahora es revivir el proyecto de unificarlos.
El proyecto de Estatuto Docente lo radicaron en el 2013 ante el Ministerio de Educación. El 28 de febrero será presentado, de nuevo, con los tradicionales pliegos de peticiones que en esa fecha presentan las centrales obreras al Gobierno.
El documento base contiene ocho capítulos, que incluyen escalafón docente que mantiene el criterio de títulos, tiempo de servicio y/o producción académica o pedagógica.
En la actualidad está abierta la posibilidad para que que los educadores aporten al proyecto, con ideas que deben ser enviadas hasta el 6 de febrero al correo :secretariageneral@fecode.edu.coo
En los gobiernos pasados no se logró avanzar, a pesar de tener conformada la Comisión Tripartita: Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (Fecode)-Ministerio-Congreso.
Fecode, que apoyó en campaña al hoy presidente, Gustavo Petro, ve esta como una oportunidad de oro, ya con la Comisión reactivada en este Gobierno, para sacar adelante la iniciativa, que ellos aseguran dignificaría la labor docente.
Procesos
LA PATRIA habló con William Velandia, secretario General de Fecode:
¿Cuál es la esencia de la propuesta de Estatuto docente?
Definir un régimen de carrera para maestros y maestras, que marque las mismas pautas para el desempeño de lo que hacemos, que según la Constitución es a trabajos iguales, marcos legal y salarios iguales.
¿Cómo es eso de que dignificará la profesión?
Con la contrarreforma educativa de Uribe, en el 2001 y el 2022, surgió el 1278, que desprofesionaliza y despedagojiza la educación. Buscamos retomar la senda de lo que es la dignificación del estatuto, recoger elementos estructurales identifiquen al profesional de la educación. Primero como pedagogo, eso no quiere decir que las demás profesiones no puedan acceder, eso sí siempre y cuando hagan la profesionalización en pedagogía, que caracteriza al docente.
Hernando Bayona
¿En la práctica qué es lo piden para ese reconocimiento?
Definir un marco de ingreso, ascensos, situaciones administrativas y retiro, que permitan cualificar y dignificar ese reconocimiento de un profesional, por el que pasan todos los profesionales de una sociedad.
¿No es muy traumático unir dos estatutos con miles de docentes y con normas de ascensos, salario y retiro diferentes?
La idea es que no haya 1278, 804, 2277 y todas esas formas que se han inventado de garantizar el ingreso del maestro a distintas modalidades con distintas legislaciones. Buscamos una norma que regule lo que tiene que ver con la profesión, que reconozca al maestro como un profesional en la sociedad.
¿Por qué unir el 1278 y el 2277? ¿No están bien así?
El del 2277 era meritorio
¿Cómo ubicar en un solo régimen a quienes llevan décadas en la docencia con los llamados nuevos?
por un reconocimiento al tiempo, títulos y una progresividad con un profesionalismo y actualización permanente con cursos y créditos para su desempeño. Desafortunadamente el 1278 concibe la movilidad como un mérito sobre una evaluación que no representa el quehacer y no reconoce el proceso investigativo de estudio y de esfuerzo por su actualización permanente. La famosa evaluación de competencias en vez de reconocer y promocionar ese mejoramiento del profesional de la educación, se convirtió en barrera para reconocer a este profesional, que ha hecho el esfuerzo para mejorar su estatus y demás.
En el proyecto tiene que haber esa conciliación entre lo que trae el 2277, en el que hay más de 80 mil maestros que no han ascendido hace más de 25 años. Y los del 1278 que han hecho todo el esfuerzo por estudiar con títulos de maestría, doctorado, que tienen unos salarios propuestos en el papel, pero que en la práctica no se les reconoce.
◆ “Las condiciones salariales de los docentes del 1278 son mejores que las del 2277, tanto al inicio de la carrera como al final de esta. Para poner esto en perspectiva, voy a comparar los salarios del año 2022 de los dos estatutos, tanto en el momento de ingreso de la carrera como el salario al final de la escala salarial. Mientras que el salario inicial de un docente con título de normalista (grado 1) en el decreto 2277 es $1.458.671, en el decreto 1278 (grado 1A) es $1.980.920. Similarmente ocurre con los docentes que ingresan al escalafón docente con título de licenciado. En el antiguo estatuto los licenciados iniciaban en el grado 7 con un salario de $2.098.960, mientras en el nuevo escalafón inician en el grado 2A con un salario de $2.493.127.
◆También existen diferencias importantes entre decretos con relación a los máximos salarios que pueden alcanzar los docentes, donde el “nuevo” escalafón tiene mejores condiciones. Al final de la carrera docente un normalista en el decreto 2277 podría alcanzar máximo el grado 8 que corresponde a un salario (año 2022) de $2.305.574, mientras que en el decreto 1278 el máximo grado para normalistas es 1D que corresponde a $4.035.219.
◆Es difícil hacer la comparación directa con los otros grados de los escalafones; sin embargo, y sólo para ilustrar, voy a mencionar el máximo nivel que podría alcanzar un docente en cada escalafón. En el decreto 2277 el máximo grado posible es el grado 14 que corresponde a $4.788.755; mientras que los máximos grados de un docente del 1278, que dependen de la formación y las evaluaciones, tienen los siguientes salarios: licenciado con especialización (grado 2DE) $5.076.067, licenciado con maestría (grado 3DM) $7.080.037 y licenciado con doctorado (grado 3DD) $9.419.180. Debo anotar que aquí no quiero entrar en la discusión sobre qué tan posible es o no ascender o reubicarse en el 1278, lo cual considero es un debate pendiente que debemos resolver activa y participativamente en el 2023, con el concurso de toda la comunidad educativa.
¿Qué pasará con los regímenes de etnoeducadores y afroeducadores?
Habíamos metido un capítulo para etnos, pero las autoridades indígenas no aceptaron porque buscan tener su propio régimen, igual que los afro. Allí tenemos maestros y maestras, lo que pedimos es que les permitan acceder a un estatuto digno, al que logremos como Federación.
El Gobierno habla de reformas como esta, pero eso vale plata y no parece alcanzar. ¿Son conscientes de eso?
Claro, pero como hemos dicho, una tarea hoy para la educación es la reforma al Sistema General de Participaciones. Eso no se puede aplazar más porque ahí está la garantía de la educación, sería una reforma progresiva que nos garantice los recursos para la educación.