INCUSIÓN A
domicilio.
Los servicios públicos en Colombia se han consolidado como un sector de vital importancia para la competitividad del país, pero, al tiempo, para el desarrollo social gracias a la solución de necesidades básicas que brinda para comunidades de escasos recursos.
La cobertura de servicios públicos se destacó como uno de los indicadores de calidad de vida que más avanzó para los colombianos en el 2017, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Calidad de Vida (ECV), realizada por el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (Dane).
Mientras en el 2016 el servicio de energía eléctrica cubría al 99,7 por ciento de los hogares de las cabeceras municipales, en el 2017 llegó al 99,9 por ciento. Lo mismo sucedió en los centros poblados y el sector rural disperso, pues se pasó de una cobertura del 95,0 por ciento a una de 98,3 por ciento.
Durante el 2017, el 90,3 por ciento de las casas colombianas contaba con servicio de acueducto. Un año atrás, llegaba a 89,6 por ciento. La cobertura de servicio de acueducto en las cabeceras municipales fue de 97,6 por ciento, mientras que en los centros poblados y rural alcanzó 62,0 por ciento.
En cuanto al gas natural, el Dane reportó que en el 2017 la cobertura a nivel nacional fue de 64,8 por ciento, en las cabeceras de 78,7 por ciento (un incremento de más de un punto frente al del 2016, que fue de 77,6 por ciento), y en centros poblados y rural disperso de 15,8 por ciento (un aumento de 4 puntos en relación con el 2016, que fue de 11,9 por ciento).
Además de la ampliación de la cobertura, se destaca –según el sector– una mejora en la calidad y continuidad de la prestación. Es importante tener claro que los resultados deben ser interpretados de acuerdo con el sector que se anali-
ce (acueducto, alcantarillado, aseo, energía eléctrica y gas combustible), y según el tipo y tamaño del prestador, porque se encuentran casos excepcionales como la prestación del servicio de energía eléctrica en los siete departamentos de la costa Caribe, los problemas que se han presentado en algunas ciudades por la disposición final de las basuras o los hechos críticos ocurridos por la suspensión del servicio de acueducto en ciudades como Villavicencio, Yopal o Tumaco. Estas situaciones están siendo permanentemente monitoreadas por la Superintendencia, que vigila que haya problemas en la continuidad y calidad en la prestación de los servicios públicos.
Además, un número importante de compañías del sector de energía y gas natural reporta estados financieros sólidos que han permitido consolidar los procesos de expansión. El ingreso que han hecho las Empresas Públicas de Medellín (EPM) en Suramérica y Centroamérica; la participación del Grupo Energía de Bogotá en Perú, Guatemala y Brasil; la incursión de Promigas en Perú, y la consolidación de los mercados de ISA en el continente, son ejemplos de esa solidez. Lo más importante es que firmas, estables y seguras en sus balances financieros, son un punto fundamental para la adecuada prestación y de calidad de los servicios públicos a los hogares colombianos.
El sector de servicios públicos aún tiene retos. En primer lugar, consolidar en los territorios donde se presentó conflicto interno la adecuación y puesta en marcha de infraestructura de servicios públicos. Es indispensable, en la estrategia del posconflicto, que estas vastas regiones puedan acceder con continuidad y calidad a los servicios públicos de energía eléctrica, gas combustible, acueducto, alcantarillado y aseo. Ello garantiza su competitividad y el desarrollo de economías legales que permitan apalancar los proyectos productivos, que son la base del posconflicto.
Otro de los desafíos consiste en amplificar la disponibilidad de información, ya que tanto en el sector privado como el público se procesan y usan grandes volúmenes de información. Por eso, las herramientas de minería de datos big data juegan un papel fundamental para conocer el comportamiento de las organizaciones y tener una mayor transparencia con los usuarios.
El 2017 fue un año en el que se continuó el camino de la consolidación de las empresas de servicios públicos con nuevas oportunidades para el país.