Llega a cines, Quiero que me mantengan, una guía para encontrar un buen sugar
Entrevista. Conozca la experiencia de los protagonistas de esta película escrita y dirigida por Harold Trompetero
VALENTINA GÓMEZ
El 4 de enero llega a la salas de cine Quiero que me mantengan, la nueva producción de Harold Trompetero, una comedia que retrata la relación de dos amigos entrañables que cansados de su mala situación económica, deciden buscar un sugar que les haga mucho más fácil la vida. Esta película, que busca retratar un poco la situación de la clase obrera del país, está escrita y dirigida por Trompetero y protagonizada por Judith Segura y Jacques Toukhmanian, acompañados por María Cecilia Botero, Luis Alberto Saveedra y Rafael Novoa, entre otros.
Hablamos con los protagonistas para conocer más detalles de Quiero que me mantengan.
¿De qué trata Quiero que me mantengan? ¿Por sugar?
qué buscar un
Judith Segura: Son un par de amigos entrañables que se esfuerzan mucho por salir adelante, pero la cosa está muy difícil, entonces a uno de ellos se les ocurre que la mejor manera es encontrar a alguien que los mantenga y ahí se empiezan a desenvolver todas las tramas.
El cine familiar colombiano tiene la capacidad de tomar cosas de las realidades comunes y dramatizarlas, ¿cómo
ven esto en esta película? Jacques Toukhmanian:
“ME SORPRENDIÓ INMENSAMENTE HAROLD, PORQUE QUÉ TIPO TAN TRANQUILO, TAN AMOROSO, TAN CÓMPLICE DE LOS ACTORES”
Como colombianos, creo que somos más propensos a la comedia simple, popular, que habla de la vida, de la idiosincrasia, de lo que sucede en el día a día.
Hace unos días me encontré con un compañero y me decía que las películas colombianas tienen una fórmula: hay una fiesta familiar, hay una pelea, está el padre… Y sí, tenemos una fórmula, pero de repente con Quiero que me mantengan no somos como tan formalistas. Harold escribe películas que son poco convencionales, además encontramos un lenguaje en el que de verdad puede ser una comedia un poco diferente, que obviamente sigue ciertos lenguajes y lineamientos de lo que se ha hecho antes, pero encontramos nuestra propia forma.
Judith: Si alguien de afuera puede ver una película, puede decir que somos exagerados, pero es así, ese es el nivel de esfuerzo que tiene que tener a alguien para sobrevivir en este país, a la gente le toca de verdad muy duro y es el realismo mágico marcado hasta la médula, lo vivimos en situaciones cotidianas y verlo plasmado en la pantalla grande, me parece importante, obviamente, nosotros le damos el toque de humor, pero son realidades crudas.
¿Cómo fue la experiencia de grabación y de trabajar junto a Harold Trompetero?
Jacques: Hay una fórmula muy ganadora para hacer cine Colombia que es reducir tiempos y en dos semanas, hacer lo que normalmente toma meses. Es un ejercicio, desde la madrugada hasta la tarde, haciendo escenas sin parar y además en una dupla que está constantemente en escena; tiene un enriquecimiento en cuestión de personajes, de conexión, de comunicación.
Me sorprendió inmensamente Harold, porque qué tipo tan tranquilo, tan amoroso, tan cómplice de los actores. Es el primero que llega, es el último que se va, a todo el mundo lo abraza, nunca se le oye de mal genio ni un grito. Además, es una persona explosiva e intensa en el trabajo, se nota que es una persona que ama lo que hace.
Judith: Siento que el hecho de que sea un trabajo tan intenso hace que estés calentito durante esas dos semanas, que el fuego esté totalmente vivo y el personaje esté creciendo todos los días ahí, porque estamos pegaditos todo el día, entonces es como entrar a un retiro de comedia.
La historia es superdivertida, las locaciones eran bien chéveres, grabar en La Calera, en medio de la calle con la gente pasando, interactuar de repente con el vecino que va caminando y seguir la escena, es muy vivo, realmente es muy vivo.
¿Cómo son sus personajes en la película? ¿Qué tanto tienen de ustedes?
JACQUES TOUKHMANIAN Actor
Judith: Los polos apuestos son parte fundamental de esta película. Mónica es una mujer de barrio que se vuelve amiga de Alejandro y para ella es muy extraño conocer el mundo en el que se mueve el ‘gomelix’. Para Mónica son normales las carencias, mientras que para Alejandro no. Yo nací y me crié en un barrio, por lo que al personaje le puse muchos de mis dichos y saqué toda la esencia que tengo del lugar donde me crié.
Jacques: José Alejandro Echaverry, es un rico que por cuestiones de la vida lo perdió todo y ahora es pobre, es una adaptación muy dura para él.
Algo que disfruté mucho es que desde Francisco, el matemático no tenía la oportunidad de ponerle tanto de mí a un personaje, mis dichos, mi timing de comedia y mis formas de actuar.