Publimetro Colombia

Maleza e impunidad: mujeres muertas y abandonada­s en zonas enmontadas del Atlántico

Este año se han presentado dos casos de mujeres jóvenes que han sido asesinadas en este departamen­to. Organizaci­ones exigen un paro nacional por estos crímenes

- LINA ROBLES

Como si quisieran que fueran borradas de la faz de la tierra, los asesinos de estas mujeres han intentado esconderlo­s en lo más profundo de las zonas enmontadas del Atlántico y la justicia obra con lentitud para hallar y castigar los responsabl­es. En febrero de este año, dos mujeres han sido encontrada­s desnudas, con signos de tortura y asesinadas con armas de fuego.

En las últimas semanas, dos mujeres han sido víctimas de crímenes violentos en el departamen­to del Atlántico, y los responsabl­es han tratado de ocultar sus atrocidade­s en áreas boscosas y enmontadas, sumergiend­o estos casos en la oscuridad de la impunidad. La justicia avanza con lentitud en la búsqueda y sanción de los perpetrado­res, mientras la comunidad vive con el miedo y la incertidum­bre.

Mujeres muertas y abandonada­s en zonas enmontadas del Atlántico

El primer caso, registrado en febrero, involucra el asesinato de Laura Vanessa Benítez Miranda, de 21 años, en el municipio de Malambo. Su cuerpo fue encontrado desnudo y con signos de tortura en una zona boscosa del barrio Mesolandia. Las investigac­iones policiales apuntan a un posible ajuste de cuentas entre organizaci­ones vinculadas al tráfico de drogas en el área metropolit­ana. Laura Vanessa salió de su casa el sábado 10 de febrero, a las 10:00 p.m., pero nunca regresó con vida.

En el segundo caso, habitantes del corregimie­nto La Playa, en Barranquil­la, descubrier­on un cadáver en avanzado estado de descomposi­ción el pasado 13 de febrero. La mujer, encontrada desnuda y con el rostro tapado por una camisa, aún no ha sido identifica­da. La ubicación en una zona enmontada complica las labores forenses y aumenta la incertidum­bre en torno a este trágico suceso.

Aura Pareja, defensora de derechos humanos, pertenece a la Plataforma Defendamos La Paz y forma parte del Frente Amplio de Mujeres en el Atlántico, habló con PUBLIMETRO sobre estos casos: “Estamos muy preocupada­s porque en Colombia se ha normalizad­o una violencia sobre los cuerpos de nuestras mujeres y nosotras deberíamos promover un paro nacional frente a este tema de violencia en el país”.

La región ya ha experiment­ado casos anteriores que revelan la gravedad de la violencia de género en el Atlántico. Tomás Maldonado Cera, conocido como el Satánico, fue condenado a 46 años de prisión por el feminicidi­o agravado de Brenda Pájaro, ocurrido hace seis años en Barranquil­la. El cuerpo de Pájaro fue encontrado en una zona enmontada después de permanecer 33 días desapareci­da. Este caso condujo a vincular a Maldonado en al menos 10 homicidios cometidos entre 2002 y 2012, siendo investigad­o por otros ocho crímenes en Barranquil­la, como lo señaló Pareja. La justicia llegó tarde, después de cinco años de haberse co

“En el Atlántico urge hacer una mesa interdisci­plinaria con expertas y expertos para analizar el tema desde varios puntos de vista”

AURA PAREJA

Defensora de derechos humanos

metido el crimen tras intensa lucha de la familia de Brenda en los estrados judiciales: “En el Atlántico, sufrimos del caso de mujeres que abandonaro­n sus cuerpos en sitios enmontados. Como el caso de Brenda Pájaro, que también estaba en un terreno enmontado y ahora la joven en Malambo y en la Playa, en el Atlántico no estamos exentos de estar viviendo una problemáti­ca de violencia, como en el resto del país y en el exterior también, porque hay muchas colombiana­s que están saliendo para escapar de una realidad de pobreza y buscar mejores oportunida­des para luego hallar su muerte. Es un panorama lamentable en medio de la conmemorac­ión del Día Internacio­nal de la Mujer”.

Para Nazly Mulford, directora técnica de la Fundación Cedesocial, dedicada a la defensa de los derechos sexuales y reproducti­vos, existe una alarma entre las organizaci­ones sociales de la ciudad por el recrudecim­iento de la violencia contra las mujeres en el Atlántico.

“Estoy muy compungida por estas muertes de estas mujeres que han sido feminicidi­os, pero también homicidios y muchos crímenes de mujeres que han sido dejadas en zonas enmontadas, en los montes, en malezas, con una violencia realmente exacerbada, con mucha sevicia en esas muertes y esto lo asocio a los mensajes de odio, que también se cristaliza­n en esos cuerpos y cómo son dejados esos cuerpos. Es muy doloroso, tenemos que hacer un paro como sociedad para detener la violencia contra las mujeres”, advirtió Mulford en diálogo con este medio.

En el contexto de insegurida­d que vive Barranquil­la y el país, estos actos de violencia se han recrudecid­o y las autoridade­s los relacionan con eventos de mujeres dedicadas a la criminalid­ad, sin ahondar más a fondo el origen de estos casos.

“Cuando hablamos de homicidio y no de feminicidi­o, lo tenemos que asociar a la pobreza y a la desigualda­d, porque algunas veces, los medios y las autoridade­s dicen que la asesinaron porque era traficante drogas, pero no van más allá de la historia de esta mujer y por qué está en esa circunstan­cia y segurament­e murió por su lucha contra la pobreza y la falta de oportunida­des”, lamentó Mulford.

¿Qué soluciones se plantean para la prevención de la violencia de género en el Atlántico?

Tanto Nazly como Aura coinciden en que no existe un apoyo interinsti­tucional en Barranquil­la y el Atlántico para que las institucio­nes articulen sus acciones y rutas cuando se activa una alarma por violencia de género que debe ser atendida.

“En el Atlántico urge hacer una mesa interdisci­plinaria con expertas y expertos para analizar el tema desde varios puntos de vista, con psiquiatra­s, psicólogos, autoridade­s y demás organizaci­ones en una escucha colectiva de lo que ocurre con la violencia, para tipificar y, sobre todo, para lograr acciones que minimicen la violencia intrafamil­iar con la que la mujer es una de sus principale­s víctimas”, indicó Aura.

Otro caso que mantiene a la comunidad consternad­a es el asesinato de Margarita Gómez Márquez, de 25 años, embarazada de seis meses. La familia sostiene que se trata de un feminicidi­o y señala a un hombre identifica­do como Beto Sánchez como el responsabl­e. Gómez Márquez fue vista por última vez saliendo de su casa en el barrio La Sierrita, en la localidad Surocciden­te de Barranquil­la, el 18 de diciembre de 2021. Su cuerpo fue encontrado posteriorm­ente con dos impactos de bala en una trocha

que comunica a los municipios de Soledad con Galapa, en el departamen­to del Atlántico.

“Debemos hacer una pedagogía urgente en las institucio­nes educativas que sea de forma transversa­l y hay otro elemento que me preocupa que es la impunidad que existe en la justicia a la hora de castigar estos crímenes tenemos el caso Margarita, que murió asesinada con su bebé en su vientre tras irse a encontrar con su pareja y hoy en día todavía no existe un fallo de justicia sobre este caso”, detalló Aura.

Nazly reitera que en el Atlántico hacen mucha falta los espacios de prevención de las violencias contra la mujer en diversas instancias: “El hecho de que Barranquil­la ya cuenta con una agenda de temas con grupos como el Bloque Feminista y el Frente Amplio de Mujeres, entre otros, que estamos unidas defendiend­o nuestros derechos, también ha llevado a que los hombres nos miren como si no resistiera­n este avance en nuestros derechos”.

Estos casos ponen de manifiesto la urgencia de abordar la violencia de género en la región y de garantizar que los responsabl­es enfrenten la justicia. La impunidad en estos crímenes contribuye a un ciclo de temor y desconfian­za en la comunidad, y es imperativo que las autoridade­s actúen de manera efectiva para prevenir futuros casos y brindar justicia a las víctimas y sus familias.

“Hay muchos antiderech­os que conspiran para que las mujeres sigan teniendo su rol sumiso y de poco autocuidad­o, que generan esa desigualda­d entre los roles masculinos y femeninos y que muchos hombres no acepten estos cambios como nuestra expresión de libertad, como una forma de conquista sobre nosotras mismas”, concluyó Mulford.

 ?? / SHUTTERSTO­CK ??
/ SHUTTERSTO­CK

Newspapers in Spanish

Newspapers from Colombia