La era de los combustibles limpios
Una sinergia entre la Nueva Refinería de Cartagena y la Refinería de Barrancabermeja, así como una serie de ajustes operacionales en los sistemas de transporte de combustibles y el trabajo integrado entre varias dependencias de la estatal petrolera, le han permitido a Ecopetrol cumplir su compromiso de mejorar la calidad del aire que respiran los colombianos.
La empresa inició la producción y distribución en el territorio colombiano de diésel limpio, que cumple con altos estándares internacionales, cuyo contenido de azufre se reduce entre 50 y 80 por ciento frente a la normatividad nacional. Pero, adicionalmente, la compañía cuenta con una amplia oferta de gas natural vehicular y de biocombustibles, como el etanol y el biodiésel, para atender las necesidades del país encaminadas a dar un nuevo aire a sus habitantes. Medellín ha sido una de las primeras ciudades beneficiadas por este esfuerzo: en marzo de 2018 se realizó una prueba piloto para entregar a la capital de la montaña y el Valle de Aburrá diésel de menos de 25 partes por millón (ppm) de azufre, la mitad de los 50 ppm exigidos por la legislación, durante los meses de lluvias (marzo-abril y octubre-noviembre). Durante marzo y abril se entregaron más de 600.000 barriles de diésel con menos de 20 ppm de azufre en promedio a Medellín y el Valle de Aburrá. En mayo y junio estuvo por debajo de las 16 ppm de azufre. Y en agosto estuvo en 14 ppm de azufre. En algunas semanas se han realizado entregas de 11 ppm de azufre. Pese a que la prueba tenía un plazo definido, Ecopetrol ha mantenido las entregas de diésel de esta calidad de manera permanente y es muy factible que continúe haciéndolo junto a otras acciones como el fortalecimiento de la masificación del consumo de gas vehicular y estudios para establecer la causa raíz del mayor volumen de material particulado en la ciudad. Así mismo, en los primeros cinco meses de 2018, junto con la Universidad de Antioquia y la Subdirección Ambiental del Área Metropolitana del Valle de Aburrá (Amva), el Instituto Colombiano del Petróleo (ICP), de Ecopetrol, realizó un estudio de las emisiones de los vehículos de carga pesada. Los resultados preliminares evidencian que para reducir las emisiones de material particulado y aprovechar el mejor diésel se requiere modernizar la flota vehicular. Bogotá también se beneficiará del plan de mejoramiento de combustibles. Ecopetrol asumió el compromiso de suministrar a la nueva flota de Transmilenio todo el gas natural vehicular que requiera y un diésel (B2, con 2 por ciento de biodiésel) con menos de 10 ppm de azufre, que corresponde a estándar Euro VI. La empresa cuenta con suficiente oferta de gas natural reconocido globalmente por sus beneficios ambientales para atender la nueva demanda de los buses que podrían entrar con esta modalidad de combustible a partir de 2019. Como complemento, la petrolera está desarrollando estudios con la Universidad de La Salle y la Secretaría Distrital de Am-
biente para modelar la calidad del aire y caracterizar las emisiones de material particulado en diferentes puntos de la ciudad.
A mediano plazo
Las acciones desarrolladas en Bogotá y Medellín se complementan con un plan de acción que busca reducir de forma escalonada, en un plazo de dos años aproximadamente, el contenido de azufre en los combustibles producidos y distribuidos en la empresa para el resto del territorio colombiano. El compromiso es entregar al distribuidor mayorista, al final de la ejecución del plan, diésel de entre 10 y 15 ppm de azufre y gasolina con máximo 50 ppm en todo el país. Así, Ecopetrol ofrecerá combustibles de los más altos estándares internacionales con plazos más estrictos que los contemplados en la senda contenida en el más reciente documento Conpes sobre calidad del aire. Para alcanzar este objetivo, la empresa emprenderá una serie de acciones como la optimización de las dietas de crudos de las refinerías, ajustes de tipo técnico en los equipos y sistemas de refinación, y adecuaciones logísticas para la movilidad de los combustibles a través del sistema de poliductos. “Ecopetrol ratifica su compromiso con la calidad del aire que respiramos todos los colombianos. Consideramos que para tener un mayor efecto se requiere acelerar el trabajo en otros factores que inciden en la calidad del aire como las emisiones en fuentes fijas y el estado de los vehículos y de las vías”, sostiene Felipe Bayón, presidente de Ecopetrol.
La ruta solar
La empresa trabaja en la aplicación de energías renovables para sus operaciones. Ecopetrol iniciará, en el primer trimestre de 2019, la construcción de un parque solar en el municipio de Castilla la Nueva, departamento del Meta, para abastecer parte de la energía que demanda el segundo más grande del país. El parque solar tendrá un área aproximada de 18 hectáreas y una capacidad instalada de entre 10 y 15 MW, lo que equivale al consumo de 6000 hogares. La planta evitará la emisión de cerca de 14.000 toneladas de CO2 en un año y de 210.000 toneladas en 15 años, además de reducir los costos de energía eléctrica del campo. Las menores emisiones equivalen a sembrar 28.000 árboles anuales. “La incursión en proyectos de gran escala de energía solar marca un hito en la historia de Ecopetrol, que se adiciona a otros desarrollos para contar con una matriz energética más diversificada y limpia, que contribuya a la protección del medioambiente y a garantizar la seguridad energética de Colombia. La apuesta por las energías renovables convertiría al Grupo Ecopetrol en uno de los principales generadores de energía solar del país”, afirma Felipe Bayón.