40 LA AMAZONIA OCUPA EL % DEL TERRITORIO
de América Latina.
Colombia, Brasil, Bolivia, Perú, Ecuador, Venezuela, Surinam, Guyana y un territorio francés. Para Tiago Juruá, analista ambiental del Instituto Chico Mendes de Conservación de la Biodiversidad de Brasil, este tipo de iniciativas son vitales para garantizar la protección, el uso sostenible y darles garantías a las comunidades que habitan en estas áreas. Teniendo en cuenta el desafío que representa un territorio tan grande, los esfuerzos interinstitucionales y la cooperación entre países son claves, agrega Juruá.
La primera noción de este enfoque nació hace más de tres décadas gracias a Redparques, red de cooperación técnica en áreas protegidas de América Latina y el Caribe, que permitió desarrollar iniciativas como el Programa Trinacional de Conservación, en el que participaron Colombia, Perú y Ecuador. De acuerdo con Julia Miranda, directora de Parques Nacionales Naturales de Colombia, ese proyecto permitió un trabajo conjunto entre países y sentó las bases de lo que hoy –mediante la Visión Amazónica y el apoyo de aliados como la Unión Europea, FAO, WWF, UICN y ONU Medio Ambiente– se consolida como un esfuerzo que sobrepasa fronteras. “Estos proyectos tienen que ser permanentes y de largo plazo. Tenemos que mantener la financiación y el trabajo conjunto. El reto del Amazonas es importante, no solo para nuestros países, sino para el clima global”, explica Miranda. El cuidado y preservación de las áreas protegidas – joyas naturales– son el mayor aporte y compromiso que los países, pueblos y comunidades indígenas tienen con el bienestar humano. Uno de los resultados de esta gestión para preservar, conservar y administrar eficazmente los sistemas de áreas protegidas del bioma amazónico es la declaración, a 2017, de 1.033 áreas protegidas (2.261.054 kilómetros cuadrados) que representan el 33 por ciento de este territorio bajo alguna figura de conservación.