Uber y DiDi atribuyen a la restricción el aumento de precios
Empresas argumentan que tarifa dinámica da balance entre la oferta y demanda
Para las plataformas de movilidad con presencia en el país —como Uber y DiDi— la restricción vehicular ha representado un aumento en sus tarifas por un tema de oferta y demanda; lo cual está directamente relacionado a una limitación en su flota.
Es decir, solo una parte de sus socios colaboradores han podido salir a las calles a generar ingresos, esta parte puede ser de hasta un 50%, según sea el modelo de limitación que se aplique por parte de las autoridades.
Según explicó Miriam Manrique, gerente general de Uber para Centroamérica, lo que está pasando actualmente producto de la pandemia —y especialmente los fines de semana— es que solo sale el 50% de los socios colaboradores a trabajar, porque el restante tiene su placa restringida.
Como consecuencia de esto, la demanda es mucho más alta que la oferta, por lo que los precios suben considerablemente para que los socios puedan suplir la cantidad de personas que solicitan el servicio.
“Entre sábado y domingo, la demanda es mucho más alta que lo que los socios colaboradores pueden suplir, y la tarifa dinámica está encendida. Lo que hace esta tarifa es subir el precio para que los socios colaboradores vayan a lugares donde haya más personas y puedan cumplir con el servicio de transporte solicitado”, precisó Manrique.
No obstante, la representante de Uber afirmó que sus usuarios atribuyen la tarifa dinámica exclusivamente al tema de las restricciones, y afirmó que si no hubiese una limitación a la movilidad no existiría ese “desbalance” entre oferta y demanda.
Por su parte, Pablo Mondragón, director general de DiDi en Centroamérica, el Caribe, Colombia y Ecuador, explicó que desde junio de 2020 el app migró hacia un modelo en el cual —una vez ingresado el destino del viaje—, la aplicación calcula la tarifa final del recorrido en lugar de hacer una estimación.
“Gracias a este ajuste en nuestra tecnología, los usuarios pueden obtener una mejor experiencia en relación con el monto del viaje. En caso de que haya elementos que provoquen cambios significativos en la ruta, como la modificación del destino final o recrudecimientos importantes en la congestión vehicular, el monto cotizado puede variar”, precisó Mondragón.
Asimismo, con el fin de mitigar el costo de las tarifas, DiDi lanzó en setiembre del año pasado la opción de DiDi Economy, a la cual los usuarios tienen viajes con descuento, en momentos de baja demanda y en zonas específicas; y también funciona como un tipo de incentivo para generar una demanda adicional a los socios conductores.
Las limitaciones
La plataforma de Uber —que actualmente cuenta con una flota vehicular de 28.000 socios colaboradores en Costa Rica— tuvo una baja del 80% de sus viajes a nivel global.
Por su parte DiDi, en los meses donde las medidas de movilización fueron más severas —especialmente en el primer semestre del 2020— la demanda de solicitudes realizadas por medio de la app tuvo una afectación de aproximadamente 40%.
Ambas plataformas cuentan con la tecnología que permite realizar el bloqueo de placas a los socios conductores que no pueden circular durante los días de restricción correspondientes, permitiendo únicamente que una parte de ellos salga a trabajar.
Por ejemplo, en junio y julio de 2020, DiDi se mantuvo bloqueada en los cantones y distritos que las autoridades clasificaban en alerta naranja o alerta amarilla (con riesgo incrementado de contagio), lo que se tradujo en la suspensión de viajes en el horario de restricción vehicular sanitaria en esas zonas.
“Operar sobre la incertidumbre siempre es complejo, pero hemos extraído aprendizajes muy valiosos; continuamente adaptamos nuestra tecnología y continuamos con nuestro objetivo de potenciar ecosistemas de movilidad más inteligentes, accesibles y seguros”, expresó Mondragón.
La continuidad del negocio
Para garantizar la permanencia del negocio en el mercado de transporte nacional, las aplicaciones han puesto su foco de atención en la generación de nuevos productos para ofrecer a los socios colaboradores la oportunidad de seguir percibiendo ingresos, y obviamente dar prioridad a la seguridad de los usuarios.
En el caso de Uber, la empresa creó en Costa Rica varios servicios. Entre estos se cuentan Uber Flash, para la entrega de paquetes o artículos; asi como Uber Shopping, que es un servicio de compra en supermercados y posterior entrega.
También, la compañía le dio la oportunidad a los socios colaboradores en la parte de movilidad, que hicieran entregas con Uber Eats.
Por su parte, la plataforma DiDi implementó durante la crisis sanitaria DiDi Hero, el cual permitía a los socios conductores acceder de manera voluntaria a un kit —donado por la compañía— que incluía una barrera plástica protectora entre el socio conductor y los usuarios.
La competencia y la supuesta “ilegalidad”
Aunque ambas aplicaciones ya llevan tiempo considerable de estar operando en el mercado nacional —Uber contabiliza 6 años y DiDi 2 años— ninguna de ellas cuenta con una regulación país que les permita ser reconocidas como plataformas de movilidad colaborativa y sobre todo, que garantice la seguridad jurídica de sus colaboradores.
El proyecto de ley para regular estas plataformas tecnológicas (expediente 21.587) —modificado en setiembre de 2019— tiene poco menos de un año de estar atascado en la Comisión de Asuntos Económicos de la Asamblea Legislativa.
Ruben Vargas, secretario general de la Unión de Taxistas Costarricenses (UTC) expresó que detrás de la restricción vehicular el problema más grande del país es el “transporte ilegal y la inoperancia de las autoridades de tránsito”.
Como forma de impulsar la inclusión de los taxistas a las nuevas tecnologías que demanda la población y también con el fin de competir con Uber, DiDi y hasta In Driver, el gremio se había aliado a dos plataformas como OMNi Taxi y Batsë (aplicación del Consejo de Transporte Público (CTP)).
Batsë fue habilitada en abril de este 2021, con el fin de apoyar al sector nacional, frente a la entrada de aplicaciones como Uber y DiDi.
Según datos de la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) la tarifa base de operación regular de un taxi, durante el I semestre de 2020 era de ¢670 por kilómetro recorrido. Para el mismo periodo de 2021, la tarifa bajó ¢10 colones (¢660). La tarifa base de un viaje en Uber o DiDi equivale aproximadamente ¢800.
Por otra parte, este jueves 15 de julio, la empresa OMNi anunció por medio de un comunicado de prensa el cierre de la operación del servicio de taxis en el país—tan solo 10 meses después de su lanzamiento— y reunió a más de 6.500 taxistas de todo el país durante el tiempo que estuvo activa