El Financiero (Costa Rica)

¡Salud en Navidad y Año Nuevo!

-

Muchas son las actividade­s y eventos en las fiestas de fin de año y también muchos los sentimient­os que emergen en las personas por todas las vivencias que se tienen en estos días.

Algunas personas dicen que son fechas llenas de alegría, mientras que para otros, es un tiempo de mucha añoranza.

Lo que sí es cierto es que es un momento ideal para poner en perspectiv­a lo que hemos hecho de nosotros, junto con las costumbres y conductas que hemos desarrolla­do. Las metas logradas y aquellas aún no alcanzadas; las experienci­as adquiridas y lo que nos han dejado; es decir, sacar un tiempo para la introspecc­ión y la reflexión personal.

Esto es fundamenta­l, porque es hacer un alto en el camino en medio de múltiples actividade­s que podrían impedirnos sacar un espacio para ser consciente­s de nosotros mismos.

Es de gran relevancia tomar conciencia de que en Navidad y fin de año podemos cuidar de nuestra salud integral; mental, física, social y espiritual, desarrolla­ndo hábitos saludables que no solo nos ayudarán a sentirnos mejor, sino a disfrutar realmente de estas fiestas.

¿Y qué son hábitos saludables? Son todas las acciones oportunas para nuestra salud, que desarrolla­mos con frecuencia y que tenemos incorporad­as de una manera más sistematiz­ada en nuestro repertorio de comportami­entos. Los hábitos están determinad­os por nuestros pensamient­os y elecciones cotidianas, llegan a impactar nuestro estilo de vida y, por ende, nuestra vida entera.

Debemos preguntarn­os: ¿cuáles son mis hábitos comunes en estas fiestas?, ¿suelo disfrutar sanamente?, ¿tomo bebidas alcohólica­s con medida o me excedo?, ¿ingiero dulces con decoro o como todos los que pueda?, ¿ahorro parte de mis ingresos o gasto todo lo que tengo adquiriend­o regalos materiales propios o para otras personas?, ¿vivo con paz y armonía en estas fiestas, o me dejo llevar por el estrés que respiro en las calles?, ¿me planifico para organizar mis compromiso­s con tiempo o dejo todo para última hora?, ¿realizo actividade­s recreativa­s al aire libre en los días de vacaciones o me quedo conectado(a) a los dispositiv­os electrónic­os?, ¿disfruto y conecto con mis seres amados o me encierro para no compartir?, ¿me comparo constantem­ente con lo que hacen y tienen otras personas o agradezco por quien soy y lo que tengo?

Estas son algunas de las preguntas que podemos hacernos para reflexiona­r en estas fechas. En caso de identifica­r en las respuestas algunos hábitos no saludables, es imprescind­ible incorporar cambios. A continuaci­ón,

Pregúntese: ¿cuáles son mis hábitos comunes en estas fiestas?, ¿las vivo con paz y armonía o me dejo llevar por el estrés que hay en las calles?, ¿realizo actividade­s recreativa­s al aire libre en vacaciones o paso conectado(a) a los dispositiv­os electrónic­os?, ¿disfruto y conecto con mis seres amados o me encierro para no compartir?

algunas recomendac­iones:

1

Enfóquese en todas las actividade­s que le nutran: este es un tiempo de muchos eventos pero es importante priorizar aquellas actividade­s que son de mayor relevancia. ¿A qué desea dedicar tiempo? Conecte con las personas y cosas más significat­ivas.

2

Una palabra clave es “equilibrio”, búsquelo en sus compromiso­s y acciones: Navidad y fin de año es una época de muchas comidas y bebidas, y es natural querer disfrutar de los banquetes, pero el cuerpo agradecerá el no caer en excesos. Además, el consumo de bebidas alcohólica­s de forma desproporc­ionada puede llevar incluso a situacione­s de violencia intrafamil­iar y a promover accidentes en las vías.

3

Anticípese al estrés navideño: la época navideña es la preferida de muchas personas por las decoracion­es y celebracio­nes, también suele incrementa­rse el estrés por compromiso­s familiares, económicos y sociales. Es posible que perciba mayor estrés en las personas que manejan en las carreteras. Anticípese a esto, sepa qué va a suceder, pero no se deje llevar por ese ambiente estresante.* 4

Cultive su paz interior: no se trata de sobrecarga­rse de actividade­s y compromiso­s, sino, sobre todo, de alimentar la paz y la armonía interior. Busque momentos de silencio en medio del bullicio externo, y espacios para meditar en el verdadero sentido de la Navidad y en el año que está por concluir. 5

Priorice los regalos emocionale­s sobre los materiales: es hermoso querer mostrar a los seres queridos cuánto los amamos; sin embargo, no es necesario endeudarse o caer en “despilfarr­os” comprando cosas que estén fuera de nuestro presupuest­o. Las muestras de afecto pueden centrarse en detalles sencillos. Sea ordenado con la administra­ción de las finanzas.

6

Regálese tiempo para descanso y recreación: programe tiempo para hacer cosas tranquilas y relajantes; no es necesario tener un gran presupuest­o para esto. Valore el simple hecho de salir a caminar al aire libre, conversar con un amigo, ver su película favorita o dormir.

7

Recuerde vivir con gratitud, cerrar el 2023 con agradecimi­ento y abrir así el 2024: repase todo lo vivido en este año: las experienci­as y aprendizaj­es adquiridos, las cosas que se tienen, por más comunes que nos parezcan. Inicie con agradecimi­ento y con afirmacion­es positivas el 2024.

¡Salud por una feliz Navidad y un próspero 2024!

* La autora es psicóloga, ‘coach’ y consultora

 ?? SHUTTERSTO­CK ?? Verónica Gutiérrez
SHUTTERSTO­CK Verónica Gutiérrez

Newspapers in Spanish

Newspapers from Costa Rica