Siga estos consejos para ahorrar o invertir en tiempo de bajas tasas de interés
Se viene un momento de ajuste en instrumentos de ahorro e inversión
Las tasas de interés locales ya han empezado a mostrar un comportamiento cada vez más evidente hacia la baja, mientras que la expectativa es que las internacionales empiecen a bajar pronto. En este periodo, algunos ahorrantes e inversionistas han ajustado sus portafolios para sacarle provecho a la etapa de transición.
El Financiero conversó con tres expertos sobre qué se recomienda en un momento donde la caída de tasas de interés reducirá parte del incentivo por ahorrar a corto plazo. Eso sí, tome en cuenta que se tratan de recomendaciones generales, ya que la tolerancia al riesgo, los objetivos y el plazo de los instrumentos variarán dependiendo de cada persona.
Atar tasas
Sílvia Jiménez, gerenta de Inversiones de Mercado de Valores, recomienda aprovechar la última cola de tasas altas de interés adquiriendo instrumentos de renta fija. En este tipo de inversiones el rendimiento y la devolución de capital se pactan de previo acuerdo. Algunos ejemplos comunes son los bonos gubernamentales, bonos corporativos y certificados de depósito a plazo.
El atractivo de pactarlas ahora es que, para cuando termine este periodo de ajuste de tasas hacia la baja, el ahorrante o inversor se quede con una tasa superior a la del mercado. “Hay que ver cómo podemos fijar una tasa que es alta, con una muy buena calidad crediticia y un plazo de tres a cinco años, entonces esa es hoy una muy buena opción para los inversionistas”, dice Jiménez.
En eso coincide Luis Diego Chavarría, coordinador de Estrategias de Inversión y Portafolio de Acobo Puesto de Bolsa. “La disminución de tasas lo que hace es apreciar el precio de los bonos, entonces ya veníamos con una política de decirle a los inversionistas que invirtieran en bonos que tuvieran rendimientos atractivos y ojalá de mayor duración, porque son lo que más se aprecian cuando los rendimientos van hacia abajo”, explica.
Si no se siente tan familiarizado con los bonos, también puede iniciar con los certificados de depósito, los cuales son instrumentos más amigables con los ahorrantes primerizos, ya que se pueden adquirir fácilmente en cualquier intermediario financiero, incluso desde la aplicación del celular.
Para inversores intermedios o avanzados, Chavarría recomienda diversificar las opciones y dividir el portafolio en una proporción de un 70% en renta fija y un 30% en renta variable (acciones, por ejemplo).
¿Dólares o colones?
El hecho de que en Costa Rica las tasas pasivas han bajado a una mayor velocidad que en el resto del mundo hace que los dólares, especialmente en instrumentos extranjeros, aparezcan como una opción atractiva.
Jiménez agrega que un tipo de cambio bajo abre la oportunidad para atar tasas interesantes en dólares que ya en colones no lo están. También espera que los intereses en la divisa caigan; sin embargo, lo harán después de los colones, probablemente más cerca de la segunda mitad del año.
Dado que no es fácil para todos acceder a los mercados internacionales, ya sea por complejidad o por cuantía de las inversiones, los expertos coinciden en que es mejor entrar por medio de fondos de inversión, especialmente para los primerizos e intermedios.
Para inversores más avanzados, Chavarría recomienda fijarse en las empresas desarrolladoras de inteligencia artificial, ya que están en un auge importante y las inversiones en ellas podrían dar réditos futuros bastante altos conforme crezca la industria.
Inmuebles ganan atractivo
Aunque es para inversores de alta cuantía, un inmueble suele ser una inversión relevante, sobre todo en un contexto costarricense en el que el mercado de alquileres viene en auge.
Una combinación de demanda creciente, oferta relativamente baja y una buena rentabilidad explican parte de este fenómeno. Según el consultor financiero, Melizandro Quirós, director ejecutivo del Centro de Estudios del Negocio Financiero e Inmobiliario (Cenfi), la rentabilidad esperada de alquileres en el país no suele bajar del 9% anual sobre el valor inicial de la vivienda, un rendimiento que tiende a superar los instrumentos financieros actuales.
“Algunas personas han tomado la opción de poder invertir en bienes raíces, ya sea directamente o mediante fondos inmobiliarios, lo ven como una buena estrategia para poder diversificar su cartera de inversiones y poder tener un mayor rendimiento”, explica Cindy Rivera, gerente de Educación Financiera de Coopenae.
Opción líquida
Si bien la reducción de tasas de interés desincentiva el ahorro, los fondos de inversión de mercado de dinero todavía se presentan como una alternativa atractiva para generar rendimientos con recursos que están prácticamente a la vista.
Este tipo de fondos se vieron beneficiados por altas tasas y aunque bajarán sus intereses, Jiménez cree que seguirán siendo una buena alternativa para tener dinero a la mano y que, al mismo tiempo, le genera un mejor rendimiento que la cuenta de ahorros.
“Para un principiante que quiere reservas líquidas por un tema de emergencia, es una muy buena opción sobre la alternativa que puede ser un certificado de corto plazo”, agrega la gerenta de inversiones.
De todos los tipos de fondos registrados en la Superintendencia General de Valores (Sugeval), los de mercado de dinero son los que más activos manejan, con un valor de ¢1.621 millones. Esto representa un 47% del total de los activos invertidos por las Sociedades Administradoras de Fondos de Inversión (SAFI) en cualquier tipo de instrumento.
Recomendaciones generales
La recomendación siempre es asesorarse con algún experto de una entidad financiera de confianza para conocer cuál es su perfil de inversionista y cuáles instrumentos se alinean con sus objetivos.
“Consulten asesores financieros que les permitan entender el panorama según las tasas vigentes o las proyecciones que se puedan estar dando para saber cuáles podrían ser esas líneas de ahorro o inversión que les puede generar mayor rendimiento”, menciona Rivera.
Aconseja estar atento a los indicadores de inflación al elegir un instrumento, porque un objetivo del ahorro es proteger el dinero de posibles aumentos de precios. Rivera sugiere estar bien asesorado sobre cuáles son los elementos de la economía que podrían influir en sus planes. Por ejemplo, revisar proyecciones de inflación para saber si la tasa ofrecida es suficiente para compensar el encarecimiento esperado.