Banda pedía Uber y asaltaba a choferes
Cinco hombres están detrás de 25 casos entre mayo y junio
Una banda recurría al engaño para solicitar servicios de transporte por medio de la plataforma Uber, desde el precario El Infiernillo, en Alajuela, y así asaltar a los conductores.
Según divulgó ayer viernes el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), se trata de un grupo compuesto por tres adultos y dos menores.
La autoridad policial precisó que entremayo y lo que llevamos de junio se recibieron 25 denuncias. Por este motivo, luego de una rápida investigación de los oficiales destacados en Alajuela, se identificó a los sospechosos y se capturó a tres de ellos. Los dos restantes permanecen en fuga.
Los presos son padre e hijo, de apellidos Mora Corrales (54 años) y Mora Gutiérrez (21), así como un menor de 16 años.
El primero ha sido investigado por delitos como robo agravado, tentativa de homicidio y portación de arma ilegal, entre otros hechos ilícitos.
En tanto, el segundo tiene antecedentes por robo agravado.
Wálter Espinoza, director del OIJ, dijo que no se descarta que haya más víctimas. Asimismo, calificó como un éxito la acción policial, pues en cuatro allanamientos en el caserío Santa Rita –donde se ubica El Infiernillo, en el distrito San José de Alajuela– se decomisó importante evidencia que relaciona a los imputados con los delitos.
Clientes falsos. Espinoza explicó que los implicados, mediante el uso de identidades falsas, descargaron la aplicación celular Uber para pedir los servicios.
En todos los casos denunciados, agregó el jerarca, los sospechosos pidieron un servicio para recoger al cliente en el barrio Santa Rita de Alajuela, sin mencionar El Infiernillo. Esas solicitudes se hacían entre las 10 p. m. y las 4 a. m.
Cuando el conductor llegaba al lugar, era abordado por cuatro o cinco de los implicados, quienes, utilizando armasblancas o de fuego, se apoderaban de billeteras, celulares, relojes, anillos o cualquier otro bien que portara la víctima.
“Siempre actuaban en cuadrilla”, afirmó Espinoza.
En ninguno de los casos se robaron el vehículo, pues el interés era apoderarse de bienes fáciles de vender o canjear.
El jefe del OIJ no detalló si esas personas se inscribieron para utilizar el servicio en efectivo o con tarjeta.
Uber permite, desde hace varios meses, que el cliente no registre una tarjeta y que pague solo en efectivo, lo que facilitaría que se abran perfiles falsos.
Las víctimas eran choferes originarios de Heredia y San José. Esto hace presumir a las autoridades que se trataba de personas que andaban por Alajuela dejando a un usuario y, al tener una llamada en barrio Santa Rita, la veían como una buena op- ción económica. La Policía supone que las víctimas desconocían la peligrosidad de la zona.
Espinoza dijo que en los operativos de este viernes se decomisaron documentos y celulares que eran propiedad de las víctimas, por lo cual se está relacionando a los detenidos con los hechos denunciados.
Polémica opción. Desde su puesta en marcha, el pago en efectivo ha causado malestar entre los conductores de Uber.
El mecanismo obliga a los choferes a mantener al menos ¢36.000 para dar vueltos a los pasajeros.
El 26 de setiembre del año pasado, cuando entró a regir la nueva opción, un grupo de choferes se manifestó en las afueras de las oficinas de la empresa, ubicadas en Plaza Antares, San Pedro de Montes de Oca.
Julie Robinson, vocera de la compañía, manifestó, en aquella oportunidad, que la seguridad de los conductores no estaba en riesgo, debido a que la formade inscripción y los protocolos que se utilizarían antes, durante y después del viaje se mantendrían.