Violenta banda gastaba sus ganancias en fiestas
Uno de los líderes fue asesinado en junio; dos hermanos están en prisión Según OIJ, grupo despilfarraba dinero en mujeres, juegos y en bares de la zona
Tres hermanos dejaron su natal Limón hace dos años y se enrumbaron a Guanacaste, para montar una red de narcotráfico en Nicoya. El negocio le costó la vida a uno, mientras que los otros dos están presos por intentos de homicidio en la disputa por territorios.
La organización, conocida como Los Limonenses, se dedicaba a la venta de marihuana y cocaína. Este miércoles, de 18 personas buscadas, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) logró detener a 16 de ellas en 19 allanamientos.
Wálter Espinoza, director de ese cuerpo policial, destacó que el grupo obtenía ganancias semanales de aproximadamente ¢5 millones, dinero que sus miembros despilfarraban en mujeres de compañía, actividades sociales y juegos. Eso dificultó seguirles el rastro a las inversiones.
La red llegó a tener hasta 20 “puntos de venta” por todo el cantón y una estructura bien diseñada, incluso con capacidad para enfrentar a organizaciones enemigas que pretendían afectarla.
En sus inicios, la banda era liderada por esos tres hermanos, pero ahora estaba al mando de un hombre de apellidos Arroyo Cárdenas.
Acción policial. A las 5 a. m. de este miércoles, el OIJ realizó 19 allanamientos simultáneos en los barrios San Martín, Pedernal y Los Ángeles.
Entre lo decomisado figuran ¢300.000 en efectivo, así como un juego de cámaras de video instaladas en el perímetro de una de las casas y que les permitía observar lo que acontecía en los alrededores.
En esa vivienda, la Policía también se incautó de un automóvil robado en Puntarenas, un kilo de marihuana, 400 gramos de cocaína, así como dos pistolas y una escopeta.
De los detenidos, 10 respon- den a los apellidos Delgado, Darwin, Chaves, Hernández, Arroyo, Matarrita, Zamora, Rosales, Carazo y Morera.
Otros tres son de apellido Vallejos; dos más de apellido Zúñiga y una mujer que se apellida Quesada. También se les investiga por varios asesinatos e intentos fallidos de homicidio.
Lazos de sangre. Uno de los hermanos que lideraban la red, identificado como Luis Diego González García, de 28 años, fue acribillado el 18 de junio pasado, cuando departía con amigos en un bar en el centro de Nicoya.
González tenía antecedentes por portación de arma prohibida, robo agravado y tentativa de homicidio. Sus dos hermanastros, de apellidos Loaiza García, están presos por dos tentativas de homicidio perpetradas semanas atrás en los cantones de Hojancha y Nicoya.
Desde la cárcel, dirigieron la banda por varias semanas, pero luego el mando cambió.
Espinoza señaló que la intervención policial se agilizó debido a que el grupo buscaba expandirse a otros cantones, principalmente a sitios turísticos.
Agregó que la droga la adquirían en Caldera y la trasladaban en cargas pequeñas en buses y en carros particulares, con el fin de no despertar sospechas de las autoridades.