Menor de 16 años preso por sospecha de dos homicidios
De ser encontrado culpable, muchacho pasaría hasta 15 años en la cárcel
Un menor de 16 años, sospechoso de asesinar en junio a Leonel Pérez Romero, de 27 años, fue detenido ayer por agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Sarapiquí.
La Policía no descarta que el aprehendido también esté involucrado con otro homicidio ocurrido el viernes pasado en Puerto Viejo de Sarapiquí, donde murió baleado un menor de 17 años, de apellidos Sánchez Vega. Este iba como acompañantede unamotocuyo conductor también resultó herido pero sobrevivió.
El primer crimen ocurrió el 28 de junio en Naranjales 2 de Puerto Viejo, en Sarapiquí, cuando Pérez Romero se encontraba en la vía pública con otras personas y el sospechoso desenfundó un arma, le disparó en al menos cinco ocasiones y se dio a la fuga.
Posible pena. Según la psicóloga clínica y forense del centro del Adulto Joven, en La Reforma, Shirley Barquero, la pena máxima por homicidio a la que se expone un menor de edad es de 15 años. De este modo, si un juez comprobara los delitos que presuntamente cometió, podría afrontar una condena similar a los años que ha vivido.
Este joven podría sumarse a 242 muchachos, en su mayoría varones, que cumplen condenas en las cárceles por delitos graves, como homicidio calificado, abuso sexual, robo agravado y tentativa de homicidio.
Esa población está en el centro del Adulto Joven en La Reforma y en el Centro de Formación Juvenil Zurquí, a un lado de la ruta 32.
Ellos son parte de los 1.142 sentenciados que tiene hoy el sistema penitenciario y que cometieron delitos antes de cumplir los 18 años. Los 900 restantes descuentan condenas sin estar recluidos.
Tras las rejas. En lo que va del 2017, siete menores han quedado tras las rejas, mientras que el añopasado fueron 11 los remiti- dos por jueces a centros penitenciarios. En el Centro de Formación Juvenil Zurquí, en Heredia, hay 93 hombres y mujeres, algunos de ellos indiciados; es decir, a la espera de sentencia. La capacidad de este complejo es de 236 personas. El Centro del Adulto Joven, en Alajuela, tiene otros 149 privados de libertad, aunque su capacidad es de 144.