La Nacion (Costa Rica)

¡Qué vergüenza!

- Jacques Sagot jacqsagot@gmail.com

La euforia de la clasificac­ión nos ocultó el hecho de que jugamos los tres últimos partidos (Honduras, México y Panamá) atrozmente mal. No hicimos el análisis que la situación ameritaba y aquí estamos ahora, despedazad­os por España. Y a como conozco a mi país, posiblemen­te un triunfillo contra Hungría el martes nos devuelva a la borrachera triunfalis­ta de siempre. Entérense, amigos, de que Hungría no juega ni chumicos, que acaba de perder con Luxemburgo por 2-1, que el último mundial al que concurrió fue México 1986, donde fue goleada por la Unión Soviética (6-0), y Francia (3-0). Fue grande en los cincuentas y sesentas: ahora es un fósil futbolísti­co. La propia España que nos borró de la cancha está lejos de su mejor nivel futbolísti­co y ocupa el octavo lugar en el ranking de la FIFA.

Contra La Furia no existimos. Fuimos sombras, fantasmas, babosas arrastránd­ose por el terreno de juego, dejando una estela de viscosa materia a su paso. No marcamos, no recuperamo­s balones, no atacamos, no contuvimos, no jugamos ni para atrás, ni para adelante, ni a los lados, no tiramos siquiera los clásicos pelo- tazos marca registrada Ramírez, que algún dividendo nos han dado en el pasado. Fuimos superados en absolutame­nte todos los parámetros concebible­s en un partido de fútbol: rapidez, técnica, anticipaci­ón, ritmo, fuerza, estrategia, táctica… Once cadáveres en el terreno de juego hubiesen tenido más capacidad de reacción que nosotros. El mundo entero fue testigo de nuestra ineptitud. Eso significa que muchos buenos rivales perderán todo interés en contratarn­os para fogueos: ¿qué se puede foguear contra un equipo inexistent­e?

Nos quedan ocho meses para transforma­r once chayotes en futbolista­s de primer nivel. ¿Mi pronóstico? No lo lograremos. Nos agarró tarde. Podemoscos­metizar tal o cual aspecto del equipo, pero no ya generar una transforma­ción profunda en el sistema de juego. Nuestro pequeñismo se nos sale por los poros. El tercermund­ismo endémico de nuestra cultura ha vuelto a encarnarse en nuestro fútbol. Con el nivel de juego exhibido ante España, marchamos hacia el que sin duda será el peor de nuestros cinco campeonato­s mundiales. Triste y sonrojante: nuestro fútbol fue cobarde, pusilánime. ¿Costa Pobre? Ni a eso llegamos.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Costa Rica