MEP pagará en el 2018 más pluses que salarios
Contraloría advierte de desequilibrio en finanzas públicas por más beneficios
A partir del próximo año, al Ministerio de Educación Pública (MEP) le saldrán más caros los incentivos que paga a los docentes que el propio salario base de sus funcionarios.
De esta manera, la institución se unirá, en el 2018, a las 82 entidades públicas que destinan más dinero al pago de beneficios que al de remuneraciones básicas, con la diferencia de que el MEP tiene la planilla más grande del país: 85.140 empleados.
El año entrante, el Ministerio destinará para el pago de sobresueldos ¢659.549 millones ( 42% del total de la partida de remuneraciones); mientras que por salarios base desembolsará ¢655.730 millones (un 41,7%), según el plan de gastos que se discute en el Congreso y debe ser votado el 29 de noviembre.
Por la remuneración total (que incluye incentivos y salario base) el MEP tiene presupuestado pagar el próximo año ¢1,31 billones; ¢76.163 millones más que en el 2017, en donde el presupuesto para sueldos fue de ¢1,23 billones.
Estos datos se desprenden de información enviada por la Contraloría General de la República (CGR) y de su Informe Técnico Presupuesto 2018.
Los sobresueldos que reciben los docentes incluyen pagos adicionales al salario base por su desempeño (anualidad), por laborar en instituciones ubicadas en los distritos de bajo y muy bajo nivel de desarrollo socioeconómico o en zonas calificadas como “incómodas o insalubres”.
También reciben un pago extra por “recargos” que incluyen tareas como dirigir la huerta de la escuela, atender a alumnos con problemas de aprendizaje, labores en biblioteca o coordinar las cooperativas estudiantiles. En total, son 50 tipos y la mayoría da un 50% adicional del salario base.
Durante este año, el MEP y los sindicatos magisteriales negociaron el pago de un nuevo plus por “peligrosidad” para los docentes por trabajar en zonas con riesgo de desastre, dengue o crímenes y, de esta forma, cumplir con el artículo 17 de la convención colectiva que estipuló, en el 2013, la creación de una comisión temporal para definir el pago de ese incentivo.
Reinaldo Ruiz, director de Planificación Institucional del Ministerio, justificó “totalmente” el incremento de los rubros de incentivos salariales para el próximo año, porque “son necesarios para cumplir con preceptos judiciales, de acceso y vinculantes con el MEP”.
“Los sobresueldos o incentivos ya existentes gozan de su respaldo técnico, jurídico y le- gal, y muchos de estos en razón de no poder contar con la autorización del total de plazas nuevas que se requieren para cubrir servicios esenciales en los centros educativos, se hace necesario utilizar la figura del recargo de funciones para poder solventar dichas necesidades (seguridad, limpieza, atención de estudiantes)”, explicó.
Para el 2018, el Ministerio contará con 2.638 plazasnuevas que también incidirán en un incremento en el pago de remuneraciones e incentivos. Empero, según Ruiz, el Proyecto del Presupuesto 2018, “estuvo basado en un intenso ejercicio de racionalidad del gasto público, sin detrimento de las inversiones estratégicas contempladas en el Plan Nacional de Desarrollo”.
Contención del gasto. El Informe
Técnico Presupuesto 2018 destaca que es la primera vez, desde el 2008 que, en el MEP, el grupo de “incentivos salariales” supera en participación la partida de “remuneraciones básicas”.
“Lo anterior, evidencia un aspecto por tomar en cuenta en las medidas de contención del gasto fiscal”, señala la Contraloría.
Ruiz dijo que como propues- ta de solución para frenar el crecimiento de incentivos, el MEP ordenó no crear nuevos pluses salariales.
La CGR también hizo un análisis del aumento de los incentivos en todo el Gobierno Central para el 2018: “El crecimiento automático que muestra la estructura de pluses salariales vigente en un contexto de estrechez fiscal, incide en el incremento del desequilibrio en las finanzas públicas”.