La Nacion (Costa Rica)

Checo aprendió español en tres meses por una tica

- Jairo Villegas S. jvillegas@nacion.com

El checo Frantisek Kocourek, de 40 años, destrozó la barrera del idioma impulsado por el amor que le surgió a primera vista por la costarrice­nse Franciny Lanza Torres, de 37 años.

La pareja, hoy en República Checa, se conoció en una discoteca de Nueva York en el 2001.

Según cuenta Franciny, desde ese día su esposo insistió en conocerla. “Yopensaba cómo si no nos podemos comunicar”.

La primera estrategia de ambos fue pedirlesay­uda a amigos en común, que solían ser costarrice­nses o guatemalte­cos. Alguno de ellos se sentaba junto a esta pareja para traducir todo lo que se decían.

“Siempre teníamos a alguien en medio, y así estuvimos tres meses”, relató esta tica.

De un momento a otro todo cambió. Ahí salió a relucir la segunda estrategia que por amor aplicó este ciudadano checo.

“Un día llegó a visitarme solo, aunque le tocaba venir acompañado de un amigo. Pensé que no sería un buen día sin alguien que nos tradujera, peroempezó a hablarme en español”.

“Me quedé sin palabras, porque no sabía que durante los tres meses en que nos estuvimos viendo y que algún amigo traducía, él estaba aprendiend­o a hablar español. Fue increíble, aprendió muy rápido y lo bueno fue que no necesitamo­s más de los amigos para conversar”, aseguró Franciny.

De hecho, Frantisek habla checo, inglés, español y alemán, pues esos idiomas son necesarios para su trabajo, en una empresa holandesa de mercadeo.

Para esta costarrice­nse no fue fácil aceptar la propuesta de mudarse a Praga, capital de la República Checa. “No tenía idea de dónde quedaba”.

Ella tenía tres años en Nueva York antes de conocer a su esposo. Poco después de cumplir 18 años, semudó de Costa Rica para trabajar como niñera con una familia italiana. Ahí no aprendió inglés al no requerirlo para su empleo. Por ello, su temor de irse a Europa crecía por el idioma.

Él iba a la Universida­d de Princeton (Nueva Jersey).

“Pensé que no debía ser tan difícil, pero realmente fue un gran cambio, porque en Nueva York escuchaba español, podía ir de compras y hablar español sin ningún problema, pero al llegar a Praga fue otra cosa.

Las personas son más frías, menos alegres que nosotros, no sonríen, aunque lo más complicado es el idioma, pero me propuse aprenderlo y ahora mi vida es distinta porque tengo amistades y miro las cosas de otra manera”, refirió.

Fruto del amor, tienen dos niños, Frantisek Kocourek (10 años) y Leandro Kocourek (8 años).

Franciny es de Aguas Zarcas, San Carlos, lugar en que se casaron en el 2003, precisamen­te la primera vez que su esposo estuvo en Costa Rica para conocer a su familia.

“A mi esposo le encanta la comida tica, sobre todo el gallo pinto. A él y a mis hijos les encanta Costa Rica; son felices cada vez que podemos viajar y se adaptan muy bien a todo. Antes viajábamos más seguido, pero ahora realmente no mucho porque los tiquetes de avión son muy caros en las fechas en que necesitamo­s, que es cuando los niños tienen vacaciones o Navidad”, reveló Franciny.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Costa Rica