Editorial de ‘La Nación’ y los sindicatos
Quien parece vivir en otro planeta es
La Nación con respecto al tema fiscal. Desearían vivir en el planeta de la evasión tributaria, del fraude fiscal corporativo, del no pago de impuestos y que no existiera el Estado.
Sobre el tema tributario, el Bloque Unitario Sindical y Social (Bussco) está muy claro y sí lo entiende:
a) Hay que cambiar el carácter regresivo de nuestro régimen tributario, es inaceptable que el 64 % de lo recaudado provenga de impuestos indirectos y principalmente que el 42 % de lo recaudado provenga de un solo impuesto, el de ventas.
b) Hay que combatir con fuerza el fraude fiscal, algo que no le interesa a La Nación. En el impuesto sobre la renta el 70 % de la evasión proviene de empresas privadas, un 4,23 % del PIB. La evasión del impuesto de ventas por parte de empresas es de un 2,36 del PIB. El total del fraude fiscal por evasión empresarial es de un 8,22% del PIB.
c) Otra dimensión del fraude fiscal corporativo es la elusión fiscal por comercio exterior o falsa facturación en importaciones y exportaciones, con lo cual se deja de percibir en impuestos un 38,8% del PIB.
d) Trasladan sus ganancias sin pagar impuestos a paraísos fiscales utilizando sociedades
off shore, por eso proponemos la prohibición legal de dichas sociedades y la eliminación del secreto bancario que estimula la opacidad fiscal.
e) Pero, además, a esos mismos sectores que cometen fraude fiscal les regalamos exoneraciones y privilegios fiscales del 5,34 % del PIB.
f) Hay que sumar lo que se deja de percibir por desgravaciones arancelarias por tratados de libre comercio (TLC), un 2,5 % del PIB.
g) Hemos advertido que transformar el impuesto de ventas en impuesto al valor agregado (IVA) significará un aumento generalizado de precios, al gravar bienes que no pagaban, y principalmente servicios que no se cobraban, por eso hemos señalado nuestra oposición.
Mesa de diálogo. Señores de La Nación, hay que discutir integralmente el tema fiscal, nos oponemos a que solo se vea una dimensión del problema, como es el gasto, como ustedes lo enfocan. El déficit no son los salarios de los empleados públicos; es el altísimo nivel del fraude fiscal corporativo (evasión y elusión); el pesado costo de exoneraciones y privilegios fiscales para esos sectores corporativos (zonas francas, importadores, exportadores, sector financiero); pero, principalmente, el problema central es la regresividad de nuestro régimen tributario, en el que pagan principalmente aquellos sectores con menos capacidad de pago, porque en este país se grava únicamente el consumo y no los ingresos, ni el patrimonio, ni las ganancias de capital.
Por eso exigimos el retiro del proyecto 20.580, porque no resuelve el problema, sino que lo complica más. Pedimos que se cree una mesa nacional de diálogo para encontrar soluciones mediante el diálogo y la negociación, y no por la vía de mayorías mecánicas.
El tema fiscal requiere abordarse integralmente, partiendo del principio de que quien más tiene, pague más. Esa es nuestra postura como movimiento sindical responsable y comprometido con una Costa Rica socialmente justa e inclusiva que garantice igualdad de oportunidades. Esa es la verdad, no la que mal se señala en el editorial de este medio de comunicación.