12 aeropuertos domésticos despegan en zonas rurales
→ Turismo se vería beneficiado, así como seguridad y atención de emergencias
Nueve son los aeropuertos rurales, repartidos en todo el país, que recibirán mejoras en los próximos dos años, para convertirse en verdaderas terminales de pasajeros para vuelos internos.
Se trata de los ubicados en Palmar Sur, Upala, Guápiles, Barra de Tortuguero, Barra de Bataan, Golfito, San Isidro de El General, Quepos y Drake.
Entre tanto, otros tres –los aeropuertos de Puerto Jiménez, Los Chiles y Coto 47– ya fueron objeto de una serie de obras y de mejoras.
Los planes. La Dirección General de Aviación Civil (DGAC) asumió el compromiso de invertir más de ¢31.000 millones en estos trabajos, que incluyen la reconstrucción de las pistas de aterrizaje, remodelaciones o construcciones (en los sitios donde no las hay) de terminales para pasajeros, parqueos y demarcaciones.
En los citados nueve aeropuertos, las obras comenzarían este año y se extenderían durante el próximo.
Uno de los proyectos más ambiciosos es en el aeródromo La Managua, en Quepos, Puntarenas, donde se están ejecutando ¢5.395 millones en expropiación de terrenos para ampliar la pista de aterrizaje, y se prevé construir una terminal aérea, iluminar la pista y mejorar la seguridad.
Asimismo, se trabaja en la segunda fase del mejoramiento del aeródromo de Drake, en Osa, donde se inyectan más de ¢3.000 millones en la ampliación y reparación de la pista, además de la construcción de una terminal aérea.
Mientras, en la pista de Palmar Sur, también en Osa, se harán remodelaciones en la terminal, donde también se contará con parqueo. Esa obra tiene un costo de ¢1.500 millones.
Según el director de Aviación Civil, Ennio Cubillo, en muchos de estos aeropuertos domésticos no existe la infraestructura para alojar a los viajeros y las pistas no están en condiciones óptimas para recibir aeronaves de pasajeros. En su criterio, las mejoras no solo beneficiarán el transporte de personas en estos cantones, sino que harán más seguras las condiciones en que operan avionetas que dan servicios para labores agrícolas.
Beneficio en seguridad. En el caso de Pococí, Limón, la intervención de Aviación Civil incluye las pistas de aterrizaje de Barra de Tortuguero y Guápiles.
“La Barra del Colorado es una zona muy visitada por el turismo, pero tenemos una situación de inseguridad. Por eso creemos que contar con un aeródromo va a beneficiar el turismo y, a la vez, va a permitir una mejor acción de la Policía, porque este sector viene siendo atacado fuertemente por el narcotráfico”, afirmó Elibeth Venegas, alcaldesa de Pococí.
Una vía de acceso más. Por su parte, el alcalde de Osa, Jorge Alberto Cole, destacó que, además de la oferta turística, contar con mejoras en las terminales de Drake y Palmar Sur significa una vía de acceso más en caso de emergencias por desastres naturales.
“En épocas de desastre, se abre una posibilidad de acceso al resto del país, tanto para evacuar si es necesario como para el transporte de personas, pues ya en otras ocasiones esta zona ha quedado aislada por daños en carreteras”, afirmó.
Para el jerarca municipal, en el caso de Drake, en los últimos años se han incrementado las visitas, pero el acceso sigue siendo un problema.
“Es una zona donde se ha hecho un esfuerzo por tener acceso terrestre y se tiene la posibilidad de llegar en lancha, pero un aeropuerto con mejores condiciones permitirá potenciar la estrategia de turismo que se planteó”, añadió.