‘País debe velar por lo que está fuera del Sinac’
Bernal Herrera es uno de 120 científicos en el mundo que elaboraron el informe sobre estado de la biodiversidad en el continente americano.
¿Cuáles amenazas enfrentan las especies? ¿De qué manera impacta a la vida humana la pérdida de los recursos naturales? ¿Quiénes son los actores responsables de cuidar el ambiente? ¿Qué debe hacer cada una de las partes para acallar el grito urgente de la Tierra?
Esas interrogantes se planteó un grupo de 120 científicos de todo el mundo, del cual es parte el ingeniero costarricense Bernal Herrera, subdirector de la Fundación para el Desarrollo de la Cordillera Volcánica Central (Fundecor).
Las respuestas están contenidas en el Resumen para decisores de la Evaluación de la Biodiversidad y los Servicios Ecosistémicos para las Américas, primer documento en sistematizar el conocimiento disponible sobre el valor de los recursos naturales en el continente.
Se trata de un trabajo elaboradao entre 2015 y 2018 por la Plataforma Intergubernamental Científico-Normativa sobre Diversidad Biológica y Servicios de los Ecosistemas (Ipdes, por sus siglas en inglés), de la que Costa Rica es miembro.
Dicho movimiento se reunió en marzo de este año en Medellín, Colombia, y aprobó los hallazgos de la investigación.
Herrera fungió como uno de los coordinadores del análisis y es el único tico participante y este 22 de abril, Día de la Tierra, presentamos un extracto de la entrevista que dio a La Nación.
--- ¿Cuáles fueron los principales hallazgos de la investigación en el continente?
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El informe de Ipbes confirma que la biodiversidad y sus beneficios para las personas son el fundamento de nuestro bienestar, ya que proveen comida, agua limpia e identidad cultural a lo largo del continente.
”Esto se acompaña en que las Américas experimentan una reducción en su diversidad biológica y, por tanto, en su contribución a la sociedad, y esto pone en riesgo la calidad de vida. Lo positivo es que el reporte sintetiza opciones para enfrentar dichos desafíos a través de políticas públicas y otros modelos de gestión integrada de paisajes”.
--- ¿Qué retos tiene Costa Rica, puntualmente?
El informe es de carácter regional y no aborda datos por país. Las tendencias que encontramos a escala continental, de alguna manera se ven reflejadas en el país.
--- ¿Cuáles son las amenazas? ---
Degradación de bosques, pérdida de cobertura de ecosistemas, como páramos y manglares; incendios forestales, tala ilegal, sobreexplotación de recursos marinos costeros...
--- ¿Y cómo se ha visto afectado el país por esos flagelos que golpean a toda América?
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En la pérdida de servicios directos como el agua, tanto en cantidad como en calidad. Esto es particularmente sensible en regiones secas del país.
”La pérdida de madera por incendios forestales o por extracción de especies preciosas de manera ilegal; la alteración del balance de los ecosistemas por la reducción de poblaciones de carnívoros ocasionada por la cacería –de mamíferos, sobre todo– y por la sobreexplotación, de peces, principalmente, cuya consecuencia es una sobrepoblación de herbívoros”.
”A esto se suman la pérdida de la agrobiodiversidad; la resistencia a enfermedades en cultivos, por ejemplo. También una menor productividad agrícola por el aumento de plagas y la reducción de la fecundación por pérdida de polinizadores.”
--- Costa Rica es de los países que más cuida su biodiversidad, ¿cuáles retos tiene aún? ---
El país ha hecho un gran esfuerzo para conservar su biodiversidad. El Sistema Nacional de Áreas Protegidas (Sinac) es prueba de ello. Pero hay espacio para mejorar. Desde mi perspectiva, el reto está en consolidar ese sistema de áreas protegidas, pero está el tema fuera de estas áreas. Costa Rica cuida su biodiversidad, pero también debe velar por la conservación
fuera de las áreas protegidas.
--- ¿Y qué se debe hacer para cuidar las especies que están fuera de las áreas protegidas? ---
Ahí hay una gran cantidad de biodiversidad. Esta no respeta los límites de las áreas protegidas. El jaguar cruza independientemente de si hay un rótulo. Por eso, necesitamos reforzar modelos de gestión integrada del territorio fuera de esas áreas protegidas. El reto está en diseñar instrumentos que logren la conservación de esa biodiversidad y la valoración de los servicios que presta fuera de las áreas protegidas.
--- ¿Pero cómo hacerlo más allá de esfuerzos como los corredores biológicos y la colocación de cámaras trampa?
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Nuestra apuesta es que, mediante el reconocimiento de los beneficios que le presta la biodiversidad a sectores como transporte, turismo y agrícola, vamos a poder integrar ese valor al quehacer de esos sectores.
”Lo que pretendemos es, a escala de un territorio completo y ya no desde un área protegida, diseñar estrategias que valoren los beneficios que le brinda la biodiversidad a todos los sectores del desarrollo”.
--- ¿Cuenta el país con iniciativas reales en ese sentido?
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Un ejemplo lo hemos desarrollado con Fundecor en Sarapiquí (Heredia) con el proyecto Sarapiquí Resiliente, donde participan actores como la Municipalidad e instituciones como el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG). Se quiere incorporar al sector privado, a propietarios (productores agrícolas o pecuarios).
”Ahí generamos modelos de enfoques integrados de paisaje que permitan que la biodiversidad y los servicios ecosistémicos sean parte de los beneficios que perciben los sectores y los medios de vida de las comunidades rurales, incluyendo pagos por servicios ambientales.
--- ¿Cuáles son las características principales de ese modelo que proponen?
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El modelo es una plataforma inclusiva de gobernanza. Se identifican los cambios en la biodiversidad (amenazas como el cambio climático). A partir de esos cambios, se diseñan estrategias que consideren cómo esos impactos afectan a los diferentes sectores involucrados.
--- ¿Entonces cuál es el gran paso que se debe dar?
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Se necesita un sistema de monitoreo de biodiversidad que nos diga cómo cambia en el tiempo y en diferentes zonas, porque no todo se comporta igual. Debemos llevar al país al siguiente nivel en conservación de la biodiversidad con esa integración de la gestión en forma transversal a los sectores del desarrollo, que valoren la importancia de la biodiversidad. ■
Debemos llevar al país al siguiente nivel en conservación de la biodiversidad. Es una integración de la gestión (...)”. Que todos los sectores del desarrollo comprendan y valoren la importancia de esa biodiversidad en su quehacer”.