Diana Fernández es la mejor tica en el Ironman
▶ Triatleta ríe luego de dos dolorosas lesiones y posibilidad de no competir más
Diana Fernández esperó casi cuatro años para volver a competir en un Ironman (3,8 km de natación, 180 km de ciclismo y 42,195 km de atletismo) y lo hizo con el mejor tiempo de una tica en categoría de mujeres.
La atleta de 36 años paró el reloj en 9:54:07, el sábado, durante el Ironman de Texas, mejorando en media hora su anterior crono de 10 horas y 25 minutos, en el Mundial de Kona, Hawái, en el 2014.
Precisamente, ese tiempo era el mejor en Costa Rica, hasta que la misma Diana Fernández lo superó.
Sin embargo, su marca no podría considerarse como récord, ya que la organización de Ironman recortó el ciclismo en tres kilómetros “por motivos de seguridad”.
Esto hace que no se reconozca como un récord, según se informó el día de la competencia.
Pese a ello, Diana confirmó que es la nacional más destacada en la distancia Ironman.
“No es lo más importante (el récord), pero es importante, porque uno entrena para eso.
”Siempre tenía esas ganas de bajar el tiempo porque Kona es el evento más duro que hay en Ironman. Pero, con toda la humildad, trabajo para lograr lo que hice.
”En la parte deportiva, me da cierta satisfacción dejar para el país una marca, para que las que vienen atrás sepan que tienen un reto; eso, al final, da nivel al triatlón en Costa Rica”, comentó desde Houston.
Pero para bajar el tiempo de 10 horas realizado en el 2014, debió ser paciente. minutos bajó la triatleta entre el 2014 y el 2018
Lesiones. Después de ese evento, la nacional sufrió una ruptura total del tendón tibial posterior del pie derecho. La recuperación fue lenta y, en el proceso, también tuvo una fractura por estrés y un desgarro.
“Me ayudó a madurar muchísimo y hacer cambios en lo personal, en el deporte y, en especial, saber que Dios tiene un plan perfecto y su tiempo así lo es también”, agregó.
Por eso, al cruzar la meta, hubo sentimientos encontrados.
“Fue significativo, era demostrarme a mí que después de lo del pie, y que me dijeron que no iba a volver a correr, llevé ese proceso poquito a poco.
”Demostrarles a mis hijos que con esfuerzo todo se puede y eso es lo que vale la pena, más que un podio o tiempo, es un estilo de vida”, agregó.
Aunque la lesión es historia, todavía Fernández no ha podido correr como quisiera. En Texas, salió del agua como primera de su categoría (35-39 años), se montó a la bicicleta y terminó de la misma forma, pero en atletismo perdió ventaja.
“No pude correr más rápido, (...), en partes de la maratón tuve que caminar. Después del kilómetro 14, se me vino el mundo abajo, trataba de mantener el ritmo e hice todos los números en mi cabeza para bajar de las 10 horas”, dijo. La motivación para superar el tramo más complicado del Ironman fue el apoyo de todos los ticos que también corrieron, pero, sobre todo, la presencia de su hijo, su hermano y su esposo.
En su categoría culminó en la sexta casilla de 103, 41 en la división femenina de todas las edades y en el puesto 300 de 2.557.
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