Nature Air perdió $1,6 millones luego de accidente
La aerolínea Nature Air responsabilizó a la Dirección General de Aviación Civil (DGAC) por las dificultades que afronta para refinanciar sus operaciones y atraer nuevos inversionistas.
La compañía estima que la imposibilidad de retomar sus vuelos le ha provocado pérdidas económicas por hasta $1,6 millones en este 2018, así como el despido de la mayoría de su planilla, que pasó de 105 a 12 trabajadores en la actualidad.
Así lo dio a conocer el CEO de la firma, Alex Khajavi, quien criticó la forma en la que la DGAC ha manejado el proceso contra la empresa desde el accidente del pasado 31 de diciembre, en el que murieron 12 personas en Corozalito de Nandayure, Guanacaste.
Aviación Civil anunció este miércoles la suspensión, de manera indefinida, de las operaciones de la aerolínea. Las autoridades fundamentaron la decisión en que la empresa no ha retomado sus actividades, pese a que desde febrero se levantó la medida cautelar dictada luego del siniestro.
Razones. Khajavi aseguró que las medidas adoptadas por la DGAC en los últimos meses provocaron la cancelación de 600 vuelos en enero y la afectación a 10.000 pasajeros que ya habían pagado por sus viajes, a los que se suman otros 15.000 que también desembolsaron dinero para vuelos futuros.
“Desde el 11 de enero, Nature Air no ha tenido la oportunidad de reunirse con el director de Aviación Civil, ni tampoco de tener una cita con el ministro de Turismo, inclusive después de repetidas solicitudes”, denunció Khajavi.
Esta versión fue rechazada por el director de Aviación Civil, Ennio Cubillo.
“En honor a la verdad, debería indicar las veces en que los hemos recibido en las oficinas de Aviación Civil, en que los hemos ayudado a solventar algunos temas que, desde finales de 2017, venían arrastrando; les pusimos plazos, los ampliamos y ahí estuvimos diligentemente”, aclaró Cubillo.
■ Un paciente habría muerto luego de una intervención quirúrgica, a consecuencia del uso de un anestésico supuestamente contaminado.
Este es el reporte que el Hospital San Juan de Dios hizo, el 26 de abril, al Ministerio de Salud, cuando dio cuenta del “desenlace mortal” de una supuesta reacción adversa al medicamento Propofol, el cual es utilizado para inducir la anestesia en cirugías y exámenes diagnósticos.
La notificación se realizó mediante una llamada telefónica , según consta en el oficio DRPIS-UNC-XVC-1132-04-2018 del 30 de abril.
El documento fue enviado por Jennifer Lee Alvarado, jefa de la Unidad de Normalización y Control del Ministerio de Salud, y a Angélica Vargas Camacho, jefa del Área de Medicamentos y Terapéutica Clínica de la CCSS.
El documento, del cual tiene copia La Nación, no especifica otras características del paciente afectado, como sexo, edad, padecimiento y procedimiento que se le realizó.
Pacientes a UCI. Según el documento del Ministerio de Salud,