Al noveno intento, el León venció al Santos
Alajuelense por fin se quitó la paternidad de Santos de Guápiles. Después de ocho encuentros, los manudos por fin consiguieron vencer a su bestia negra para llegar a la última fecha de la cuadrangular en la pelea a ganarla y meterse en la final.
“El equipo está totalmente metido. Partido a partido, estamos demostrando”, comenta el defensor Kenner Gutiérrez, motivado con el triunfo de anoche ante el cuadro santista.
La última vez que los manudos se impusieron a los santistas fue el 4 de diciembre del 2016, cuando consiguieron ganar 2 a 1 con goles del artillero Johnny Woodly.
En aquella ocasión, el equipo de la ciudad de los mangos era dirigido por Guilherme Farinha, mientras que el Santos, al igual que en la actualidad, jugaba bajo el mando del técnico Johnny Chaves.
El último duelo entre erizos y guapileños, previo al que disputaron este miércoles, fue el 29 de abril en la segunda fecha de la liguilla. En el partido que se disputó en el Estadio Ebal Rodríguez, un gol del zaguero Alexis Gamboa sobre la hora les dio los tres puntos a los rojiblancos.
Los ocho cotejos que pasaron para que los liguistas por fin regresaran a la victoria ante el cuadro guapileño, terminaron con un saldo de cinco derrotas y tres empates.
De esa forma, los erizos sumaron tres puntos de 24 posibles, en los anteriores ocho duelos, para un rendimiento en esos partidos de un 12,5%.
Uno de los juegos que más daño le había causado a Alajuelense fue el último en el Morera Soto. Santos visitó el recinto manudo el 7 de abril y, en esa ocasión, lo derrotó 2 a 0.
En ese partido, la afición se metió con Nicolás dos Santos y tampoco perdonó a dos de sus futbolistas: Patrick Pemberton y José Luis Cordero. Con esa derrota, cedió la oportunidad de ser líder cuando apenas quedaban dos fechas de la primera fase por delante. Santos, por su parte, tomó impulso para clasificar.
“Fue un mal partido nuestro, no estábamos acostumbrados a esto en casa, pero de ahora en adelante hay que aprender de esto –dijo Allen Guevara en aquel momento–. Es un golpe bajo, sabíamos que nos jugábamos el liderato y fallamos en nuestro estadio. Cuando se pierde en casa y con errores tan puntuales, la afición te la cobra”.
Anoche. la historia cambió de rumbo y, por el contario, Santos quedó de nuevo en deuda en la fase final del campeonato y sumó una derrota ante un club al que había dominado.
La Liga se sacudió en el mejor momento de la sombra de Santos y ahora sueña con una hombrada en el Saprissa.
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