Sindicato del ICE exige buscar responsables por Reventazón
Los sindicatos del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) exigen a la nueva Administración dar con los responsables del manejo de los daños que presenta la planta hidroeléctrica Reventazón.
La obra, en Siquirres de Limón, se inauguró en setiembre pasado, y para febrero salió de operación debido a la necesidad de reparar una grieta en el vertedero de excedencias del macizo rocoso.
“Nuestra posición es que deben sentar las responsabilidades correspondientes y más tratándose de recursos públicos”, dijo Juan de Dios Cordero, coordinador del Frente Interno de Trabajadores (ICE-FIT).
Cordero trataría el tema con la nueva presidenta ejecutiva de la entidad, Irene Cañas, en una reunión, la tarde de este martes. Para el líder gremial, hubo un “manejo irresponsable” del problema por parte de la Administración anterior, pues esperó mucho tiempo para atenderlo.
“Queremos que se nos explique, si se conocía de esa fisura hace tanto tiempo, por qué se esperó tanto tiempo para la reparación, si todas las recomendaciones de expertos eran vaciarla el año pasado; no dejar pasar el tiempo por razones publicitarias”, afirmó Cordero.
Un informe enviado a la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) por Luis Pacheco Morgan, gerente de Electricidad del ICE, el 24 de agosto del 2017 , señala que se sabía de la grieta desde semanas antes de la inauguración de la planta, el 16 de setiembre del 2016. Así consta en el oficio 0510-0818-2017.
El dirigente apuntó que la tardanza en atender el caso (19 meses), elevó el costo de los daños a $25 millones. La suma la estimaron técnicos afiliados al FIT-ICE. No obstante, creen que además habría que sumar el agua del embalse que no ha sido posible utilizar y la energía que dejó de generarse.
Esta reacción llega un día después de que el Instituto revelara que la gravedad de la grieta en el proyecto Reventazón hará que el reinicio de la planta sea en junio y no en este mes.
No obstante, el contrato de la empresa responsable de las reparaciones –al cual tuvo acceso a La Nación– dice que sería, en el mejor de los casos, en agosto.
Reventazón es la hidroeléctrica más grande del país; tuvo un costo de $1.567 millones.
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