Tenis de mesa se ampara en nuevas instalaciones
▶ Usa gran complejo que abrió en octubre y sirve para prácticas, torneos y charlas
Tras siete meses de ver una obra hecha realidad, en la Federación Costarricense de Tenis (Fecoteme) están seguros de que el complejo de ¢237 millones ubicado en el Parque de la Paz ayuda al crecimiento y expansión de esta disciplina.
Hoy es un espacio sin límite para entrenamientos de selecciones, torneos nacionales e internacionales y capacitaciones. Tiene oficinas, habitaciones, baños y comedor.
También está abierto al público y la persona que desee utilizarlo debe afiliarse a la Federación y pagar ¢12.000 por mes o ¢3.000 por día, con lo que se apega al reglamento del moderno inmueble.
Pero, además, fue creado con la idea de ser la casa de nuevas promesas.
“Estamos abriendo escuelas para niños y tenemos un proyecto de búsqueda de talentos en primer y segundo grado, de escuelas aledañas”, dijo Alexánder Zamora, presidente de la Federación Costarricense de Tenis de Mesa.
Zamora indicó que desde octubre hasta la fecha se han afiliado más de 150 personas y al menos 60 seleccionados nacionales practican ahí.
Anteriormente, los tenismesistas entrenaban en un espacio del Estadio Nacional, debajo de unas graderías. Ahí cabían ocho mesas y ahora el complejo cuenta con 22.
“En el estadio teníamos el problema lógico y entendible de un tema de mantenimiento y lo alquilaban para fútbol, conciertos y otras actividades, entonces teníamos que estar parando entrenamientos”, comentó.
Cuando se realizan torneos con equipos de todo el país, sirve como hotel para aquellos atletas que vienen de lejos.
Debut. Esta instalación incluso ya se prepara para recibir su primer certamen internacional, en agosto, cuando se realice el Latinoamericano Juvenil Sub-15.
“Ya ahora nos toman en cuenta, la federación internacional nos dio un campamento para noviembre y con un centro bonito como este nos ubican mejor como opción para hacer actividades de Centroamérica y el Caribe. Para eventos más grandes no da, pero, modestia aparte, es el mejor gimnasio en Centroamérica”, añadió el jerarca de este deporte.
Para Zamora es ver un sueño cumplido que hasta superó sus expectativas, desde el momento en que le planteó la idea al Instituto Costarricense del Deporte (Icoder), hace cinco años.
Su intención fue que el monto se apegara a la realidad del país y al final la obra de 1.500 me- tros de construcción pasó de ¢250 millones a ¢237 millones.
Ese dinero provino del Icoder, con el que firmaron un convenio de administración.
“Para el tamaño de la obra es bastante considerable la economía y además de eso la dimensión de la infraestructura”.
Con el gimnasio completo, la Federación se comprometió a equiparlo y aunque aún faltan elementos, la ayuda internacional les dio otro empujón.
Las mesas fueron una donación de la embajada de Japón y a través de la Federación Internacional consiguieron el piso sintético que ronda ¢25 millones.
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