AI denuncia empleo de paramilitares en Nicaragua
→ En muchos casos, se identificó a un policía cuando la víctima murió baleada
WASHINGTON. AFP. - En Nicaragua, las autoridades usan grupos paramilitares, las llamadas “turbas sandinistas”, para reprimir las protestas ciudadanas contra el gobierno de Daniel Ortega, señaló, este martes, la organización de derechos humanos Amnistía Internacional (AI).
“Reprimen a la población civil con armas semiautomáticas y protegidos por la propia Policía”, afirmó la directora para las Américas de AI, Erika Guevara-Rosas, respecto a la reacción gubernamental a las manifestaciones contra Ortega y su partido Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), que desde el 18 de abril deja al menos 85 muertos.
El informe Disparar a matar. estrategias de represión de la protesta en Nicaragua, que AI presentó este martes, además confirma el uso de ejecuciones extrajudiciales por parte de los agentes durante las manifestaciones callejeras.
Esa organización retoma datos del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) registrados entre el 19 de abril y el 2 de mayo, cuando contabilizó un total de 45 víctimas fatales, de las cuales, al menos 36 recibieron impactos de bala.
De ese total, 22 personas recibieron balazos en la cabeza, el cuello o el tórax. De los nueve casos de fallecidos documentados por AI, ocho presentaban herida por arma de fuego y, en dos casos, se habría identificado a un policía al momento de perpetrar del crimen.
El informe también señala que personal médico del Hospital Bautista de Managua le reportó a la organización que entre el 20 y el 24 de abril, atendió a 50 heridos, de los cuales 34 tenían heridas por arma de fuego.
Estas denuncias coinciden con las que realizó, la semana pasada, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sobre el uso excesivo de fuerza por parte del régimen para reprimir las protestas.
Guevara-Rosas afirma que esta es la primera ocasión en la que se registra violencia tan radicalizada con grupos que están en colusión con el Gobierno.
Disconformes. La representante explica que el descontento ante medidas gubernamentales desató una fuerte respuesta de los ciudadanos en las calles.
“Los estudiantes, inclusive antes del proyecto de reforma del seguro social que generó estas protestas, ya expresaban descontento hacia políticas económicas y sociales, limitaciones a la libertad de expresión, mayor censura de los medios, persecución de defensores de derechos humanos –especialmente mujeres–, control absoluto del Estado de organizaciones de la sociedad civil”, afirmó la encargada.
Para enfrentar la crisis, Guevara-Rosas recomienda que el Estado asuma la responsabilidad por los hechos.
“Es fundamental que cumpla con sus compromisos asumidos con la visita de la CIDH, que hizo 15 recomendaciones.
”Además, es necesario permitir el establecimiento de una comisión de expertos independientes que pueda hacer una investigación imparcial y expedita de todas estas graves violaciones a los derechos humanos y lleve a la Justicia a todos los responsables”, agregó.
Asimismo, la directora cree necesario que se discuta la crisis del país centroamericano en la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos, la cual se llevará a cabo el 4 y 5 de junio, en Washington.
■