Plan del PRN para la Red de Cuido desfinanciaría proyectos sociales
→ Desaf planteó varias preocupaciones sobre la propuesta, mientras congresista alega que corresponde al Ejecutivo hacer los ajustes
Un proyecto del Partido Restauración Nacional (PRN) para aumentar los recursos de la Red de Cuido tendría el efecto secundario de desfinanciar otros programas sociales del Estado.
Se trata del primer plan de ley que presentó la diputada y segunda secretaria del Directorio legislativo, Ivonne Acuña, el 15 de mayo anterior.
La iniciativa obligaría a subir de un 4% a un 6% el porcentaje del Fondo de Desarrollo Social y Asignaciones Familiares (Fodesaf) que se destina a la Red de Cuido, programa que atiende a niños en edad preescolar para permitir que sus progenitores puedan trabajar o estudiar.
Sin embargo, el plan obligaría al Gobierno a hacer gastos adicionales sin crear nuevas fuentes de financiamiento.
La propuesta de Acuña no define de dónde se tomaría el dinero para elevar el porcentaje o a cuáles otros programas sociales se les quitarían fondos para poder dar a la Red ¢12.600 millones más (de ¢25.300 millones a ¢37.900 millones).
¿Cómo se haría entonces? El Gobierno tendría que endeudarse más para cumplir la obligación o quitaría recursos a otros programas, entre esos están el de nutrición del Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS), el Programa Nacional de Empleo, las becas Avancemos y las pensiones de adultos mayores y del régimen no contributivo.
Asimismo, de allí se financian proyectos de saneamiento rural, promoción de las medianas y pequeñas empresas, así como agua potable para comunidades rurales, según reflejan las partidas presupuestarias que reparte el Fodesaf cada año, de acuerdo con informes del Ministerio de Hacienda para el ejercicio presupuestario 2018.
Un equipo de la Dirección de Desarrollo Social y Asignaciones Familiares (Desaf) también alertó sobre la problemática que plantearía el proyecto.
Cerca del 80% de planes financiados por el Fodesaf están fijados por ley, mientras el 20% restante se reparte entre variedad de iniciativas sociales.
La Nación intentó consultarle a Acuña por qué no se buscó una fuente de recursos para cubrir el hueco que se generaría a los otros programas, pero la congresista remitió a su asesora Isabel Brenes, quien precisamente fue viceministra de Bienestar Social en el gobierno de Laura Chinchilla y primera directora del Programa de la Red de Cuido.
Sin recursos. Brenes explicó que la idea es aumentar los recursos destinados al cuido de la niñez en extrema pobreza, pues aseguró que, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), la desatención de ese grupo etario se ha duplicado en los últimos tres años.
En cuanto a cuáles programas podrían ser afectados para beneficiar la Red de Cuido, ella alegó que eso “es una prerrogativa administrativa de quien dirige el Fondo” o, más allá, del Poder Ejecutivo, en la persona del ministro de Trabajo, jerarca rector del Fodesaf.
“La ley no está diciendo cuál es el reajuste que tiene que hacer en la distribución de los montos que no están definidos por ley; eso le toca al Ejecutivo”, dijo la asesora.
Dudas. Precisamente lo anterior es una de las tres preocupaciones que la Desaf señaló en un informe tras realizar un análisis del plan de Acuña.
“El proyecto crea nuevas obligaciones legales que suman más rigidez a la inversión social. La OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) ha manifestado que el presupuesto del Fodesaf es sumamente rígido. Dicha rigidez dificulta la capacidad de la Desaf de mejorar la eficiencia, estableciendo y revisando prioridades de política y aplicando la rendición de cuentas de las instituciones responsables de ejecutar los programas”, se resaltó en el reporte.
La segunda preocupación de esa Dirección es que se incremente el presupuesto público ya fijado por ley, debido a que el Estado busca, desde el 2016, implementar acciones para lograr una gestión para resultados en el desarrollo.
Entonces, fijar gastos por ley, poco fácil de modificarlos, sería contrario a destinar recursos por resultados.
Además, como tercer punto, la Desaf estima que hay contradicción entre artículos del proyecto, pues mientras en el tercero dice que se consideran como beneficiarios a todos los menores de siete años, en el artículo 15 dice que los recursos se ejecutarán según la Ley N.° 5.662, que claramente estipula que son beneficiarios los niños que “se encuentren en situación de pobreza o pobreza extrema”.
El proyecto de Acuña plantea, además, que la inversión en la Red de Cuido se pueda considerar como parte de lo que el Estado invierte en educación, para superar el 8% ordenado constitucionalmente.
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