Macho Coca y 14 más quedan libres
→ Solamente el líder del grupo descontará seis meses de prisión preventiva
El Juzgado Penal de Limón dejó libre al empresario Gilbert Bell Fernández, conocido como Macho Coca, y a otras 14 personas, quienes figuran como sospechosas de sustraer combustible de un poliducto de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope).
Durante la audiencia de solicitud de medidas cautelares, que finalizó el domingo por la noche, el Juzgado determinó que Bell y los otros involucrados deben firmar cada ocho días, no pueden salir del país y tienen prohibido acercarse a los testigos del caso.
En tanto, el líder de la agrupación, de apellidos Rodríguez Ramírez, descontará seis meses de prisión preventiva.
Ante la determinación del Juzgado, la Fiscalía Adjunta de Limón informó de que apeló la resolución, pues estima que existe peligro de fuga de varios de los sospechosos.
El abogado de Bell, Manrique González, expresó que la resolución del juez es “en cierto modo, aceptada, ya que no había razón de ser para estimar el grado de participación de su cliente en esa organización”.
El caso. El martes 5 de junio trascendió que Bell y otras 13 personas fueron capturadas en 19 allanamientos por presunta extracción de combustible. Otros dos sujetos se entregaron al Organismo de Investigación Judicial (OIJ) horas después de las detenciones.
De acuerdo con la Policía Judicial, Macho Coca aparentemente brindaba apoyo logístico a la banda, por medio del préstamo de vehículos y propiedades, al tiempo que también daba dinero a la organización.
La investigación permitió establecer que los miembros del grupo sustraían gasolina súper y plus 91 (regular), diésel y Jet-A1 (combustible de avión) del poliducto de Recope en el tramo que va de la provincia de Limón a Ochomogo (Cartago). Después, comercializaban de manera ilegal el hidrocarburo.
Según las estimaciones de la Refinadora, el perjuicio económico causado por esta banda entre noviembre del 2016 y mayo del 2018 es de aproximadamente ¢2.092 millones.
El OIJ estableció que dentro de la organización había personas dedicadas al transporte y otras a la extracción, mientras que había individuos que tenían asignadas tareas de instalación de tomas y soldaduras.
La Fiscalía, por su parte, precisó que la mayoría de extracciones se hacían por las noches, y que, en uno de los casos, se amenazó a un encargado de seguridad con un fusil AK-47, por lo que el afectado puso la denuncia ante las autoridades. La pesquisa del caso se sigue bajo el expediente 17-000913-063-PE.
Bell fue absuelto recientemente en un juicio que afrontó junto con su esposa, Andria Araya Bougle, por infracción al Código de Minería.
También fue acusado en diciembre por usurpación de bienes de dominio público, por la construcción de un muelle en Portete, Limón, en una franja de terreno del Estado.