EE. UU. asegura haber reunido a 522 menores con sus familias
→2.05▶ inmigrantes siguen al cuidado del ente rector de Salud y Servicios Humanos →Gobierno asegura que sabe dónde están todos los niños que tiene en custodia
WASHINGTON.AFP- Más de 500 niños separados de sus padres bajo la política de “tolerancia cero” a la inmigración, fueron reunificados con sus familias en Estados Unidos, afirmaron, el domingo, funcionarios del Gobierno.
El Departamento de Seguridad Nacional informó de que 522 niños separados de sus padres como parte del combate a la inmigración “ilegal” se han reunido con sus familias, pero otros 2.053 menores permanecen al cuidado del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos.
En la primera publicación de datos oficiales desde que Trump puso fin el miércoles a las separaciones familiares, el Departamento señaló que el proceso de reunificación “está bien coordinado”.
“El Gobierno de Estados Unidos conoce la ubicación de todos los niños bajo su custodia y está trabajando para reunirlos con sus familias”, agregó la cartera en un comunicado difundido el sábado por la noche.
Al tratar de detener el flujo de decenas de miles de migrantes de América Central y México que llegan a la frontera sur todos los meses, Trump ordenó, a principios de mayo, que todos los adultos que cruzaran ilegalmente serían arrestados y sus hijos separados de ellos.
Marcha atrás. Después de que imágenes de niños encerrados en jaulas provocaron una ola de indignación en el país y en el mundo, Trump puso fin a la práctica de la separación, pero continuó con su discurso de línea dura sobre la inmigración.
El presidente considera ese tema como crucial antes de las elecciones legislativas de mitad de periodo, en noviembre.
“No podemos permitir que todas estas personas invadan nuestro país”, dijo Trump el domingo en Twitter.
“Cuando alguien llega, debemos inmediatamente, sin jueces ni juicios, llevarlo de vuelta al sitio de donde vino”, dijo, lo que sugiere un tratamiento sin el debido proceso legal que la Constitución de EE. UU. garantiza a “cualquier persona”.
Casi todas las familias que llegan al país han solicitado asilo oficialmente.
“Nuestro sistema es una burla a la buena política de inmigración y a la ley y el orden”, escribió Trump, quien ha tratado, repetidamente, de vincular a los inmigrantes con el crimen.
Huyendo de la empobrecida América Central, los inmigrantes buscan una vida mejor y también un refugio contra las bandas criminales que aterrorizan su región, que tiene una de las tasas de homicidios más altas del mundo.
Ever Sierra, deportado tras haber pretendido ingresar a Estados Unidos, dijo que hará un nuevo intento en pocos días.
Separados. Sierra llegó a Honduras con los zapatos de su hija de ocho meses colgando de su mochila. La niña quedó detenida en un centro de internación para inmigrantes en McAllen, Texas, junto con su madre.
El exasesor adjunto de seguridad nacional de Trump, Tom Bossert, dijo que la semana pasada advirtió a la Administración que las autoridades carecen de “la capacidad de detener a estos padres e hijos, juntos o por separado”.
Propuestas de ley. El Congreso no ha aprobado dos proyectos de ley presentados por la mayoría republicana.
Una propuesta de línea dura fue derrotada la semana pasada, mientras un proyecto de ley de “compromiso” también fue rechazado.
Trump y otros republicanos acusan a la oposición demócrata de ser blanda con el crimen y la inmigración.
El sábado, el exaspirante presidencial republicano Mike Huckabee publicó una foto en Twitter de miembros de la pandilla MS-13 y afirmó que esos latinos, fuertemente tatuados, eran parte del “comité de campaña” de la jefa de la bancada demócrata Nancy Pelosi.
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