Un mismo sensor podría medir diversas condiciones de salud
→ Permitiría conocer niveles de glucosa, colesterol y varias proteínas, entre otros
Un equipo internacional diseñó un sensor que puede medir diferentes manifestaciones de químicos en el cuerpo humano, con el fin de saber cómo evolucionan tratamientos médicos, procesos quirúrgicos o diferentes males crónicos o neurodegenerativos.
Este dispositivo es muy pequeño y fabricado con materiales de bajo costo, señaló el grupo de científicos, liderado por la Universidad de Cambridge y la Universidad Rey Abdullah de Ciencia y Tecnología de Arabia Saudita (KAUST, por sus siglas en inglés), en una publicación de la Revista Science Advances.
El producto tiene la particularidad de que puede medir los niveles de metabolitos, que son sustancias que el cuerpo produce en los diferentes procesos del metabolismo, como glucosa, colesterol o algunas proteínas. Esto lo hace utilizando diferentes fluidos del cuerpo: sudor, lágrimas, sangre o saliva.
Los niveles de metabolitos pueden determinar si un tratamiento médico está funcionando o requiere cambios; cómo evoluciona un paciente después de una cirugía e incluso cómo es la progresión de una enfermedad.
El sensor está hecho con un polímero semiconductor, un tipo de molécula que es capaz de movilizar electrones y conducir electricidad.
Estos polímeros se han utinosticar Novedad lizado con éxito en la industria, por ejemplo, en la fabricación de celdas solares o para desarrollar nuevos materiales en electrónica, pero no había tenido aplicaciones claras para diaglíquidos condiciones de salud.
“Hemos tenido que sortear muchas dificultades. En este tipo de biosensores, la comunicación entre los electrodos y las otras partes en sí no es eficiente, entonces tuvimos que adicionarle moléculas que actuaran como conectores y potenciaran ‘la señal de comunicaciones’”, puntualizó Anna-Maria Pappa, autora principal de la investigación, en un comunicado.
Para superar el problema, Pappa y sus colaboradores usaron un polímero ya existente, elaborado por el Colegio Imperial de Londres meses atrás.
Ese polímero actúa como una red de moléculas que consiguen que los electrones producidos en las reacciones electroquímicas puedan fluir, y así, cuando entra en contacto con como saliva, sudor o sangre, absorbe el líquido y se “hincha”, lo que le permite analizar mejor su composición.
“ES LA PRIMERA VEZ QUE SE DEMUESTRA QUE ALGO ASÍ ES POSIBLE. ABRE UN MUNDO DE DIRECCIONES PARA BIOSENSORES, EN EL QUE LOS MATERIALES SE PUEDAN DISEÑAR PARA INTERACTUAR CON UN METABOLITO ESPECÍFICO, PRODUCIENDO
’ ’ SENSORES MÁS PRE CISO S. Anna-Maria Pappa
Investigadora principal
Aplicaciones. Al principio, el sensor se probó para medir los niveles de ácido láctico, una sustancia que se acumula al realizar actividad física o después de una cirugía.
No obstante, los investigadores aseguran que podría servir para medir niveles de colesterol, glucosa o triglicéridos con solo cambiar la enzima.
Los científicos planean desarrollar sensores para monitorear la acción de células humanas en el laboratorio (y no en el cuerpo) para que, con modelos, se pueda mimetizar el trabajo de nuestros órganos y, por ejemplo, probar la potencia o toxicidad de futuros fármacos.
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