Hacienda alista una emisión de $4.000 millones en eurobonos
Medida pretende quitar presión en el mercado local ante posible alza en tasas
El Ministerio de Hacienda alista una solicitud a los diputados para poder emitir $4.000 millones en el mercado internacional, una vez que se apruebe la reforma fiscal en la Asamblea Legislativa.
Rocío Aguilar, jerarca de Hacienda, confirmó a Bloomberg que el Gobierno tiene el objetivo de vender $1.000 millones anuales de eurobonos en un plazo de cuatro años.
Esto trascendió la tarde de este jueves, cuando la citada agencia de noticias lo publicó en una nota.
El objetivo de la medida es quitar presión en el mercado local ante una posible subida en las tasas de interés.
Ante la insuficiencia de Hacienda para financiar sus gastos mediante la recaudación de impuestos, la institución pide prestado dinero dentro del país.
Empero, la necesidad de fondos es tanta que Hacienda compite con otras entidades financieras y se ve forzada a subir sus tasas para obtener el dinero.
“Lo que estamos pensando es una autorización paraguas que cubre varios años. Si continuamos usando solo el mercado local, seguiremos apretando las tasas de interés locales”, aseguró Aguilar a la agencia de noticias estadounidense.
“Volveremos a los mercados internacionales”, aseguró la jerarca a Bloomberg.
A abril del 2018, la deuda del Gobierno alcanzó los ¢16,9 billones, de los cuales un 75% está en moneda nacional y un 25% en divisas.
Dicho monto representó, en abril, un 48,3% de la producción total estimada para este año.
El Gobierno afronta desde el 2010 un persistente déficit fiscal, el cual debe financiar con recursos internos y externos.
En noviembre del 2012, la Asamblea Legislativa aprobó la colocación de deuda externa por un monto total de $4.000 millones, con la autorización para vender $1.000 millones anuales en el extranjero.
No obstante, a partir del 2016, el país debe conseguir los recursos para financiar su déficit en el mercado interno.
El déficit fiscal del Gobierno Central finalizó, el año pasado, en un 6,2% del producto interno bruto (PIB). Para este año, el Banco Central de Costa Rica (BCCR) proyectó que ascenderá al 7,1% de la producción, y en el 2019, al 7,9% del PIB .
Tal panorama se vislumbra sin la eventual aprobación del plan fiscal en el Congreso.
La reforma produciría un aumento de la recaudación del 2% del PIB, que, junto con las medidas de gasto, generaría recursos equivalentes a un 3% del PIB; empero, el Banco Mundial estimó que se requiere un ajuste del 4,5% de la producción. Efectos. La posible vuelta de Costa Rica a los mercados de deuda internacional ocurriría luego de que el país fue ampliamente criticado por las agencias de calificación de riesgo, debido a su falta de acción política para tomar decisiones que reduzcan su problema fiscal, en un contexto global de tasas de interés al alza.
No obstante, para el analista del mercado internacional Douglas Montero, fuera de nuestras fronteras hay apetito por emisiones de Costa Rica. Añadió que el país sigue beneficiándose, a escala internacional, de una percepción de que somos una economía relativamente estable y una democracia de larga tradición.
Para el economista José Luis Arce, hablar en este momento de un endeudamiento externo podría ser precipitado y generar dudas sobre la voluntad para efectuar ajustes en las finanzas del Gobierno.
Sin embargo, el especialista agregó que optar por un endeudamiento en mercados foráneos puede ayudar a contrarrestar los efectos adversos de un ajuste fiscal.
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Bonos ticos se siguen vendiendo
“EN EL CASO DEL PAÍS, CLARO QUE VA A HABER APETITO. LOS BONOS DE COSTA RICA SE SIGUEN TRANSANDO DESPUÉS DE LOS ‘DOWNGRADES’ (LAS REDUCCIONES EN LAS CALIFICACIONES) (...) Y DE QUE LA REFORMA FISCAL
’ ’ NO SE ESTÁ APROBA NDO . Douglas Montero
Analista de mercados externos
“OTRO POSIBLE OBJETIVO DEL MINISTERIO DE HACIENDA SERÍA TENER LA LLAVE PARA ACCEDER A LOS MERCADOS FINANCIEROS INTERNACIONALES EN LOS PRÓXIMOS AÑOS, CON EL PROPÓSITO DE REFINANCIAR UNA PARTE DE LOS VENCIMIENTOS DE SU
’’ DEUDA EN DÓLARES. Alberto
Franco
Economista