La Nacion (Costa Rica)

Sin brillar, Celso mostró buenas cifras en Rusia

- Fue el que más remató, el que más ocasiones generó y el que más pases dio Cristian BrenesB. cristian.brenes@nacion.com

Si correspond­iera ponerle una nota a Costa Rica en Rusia 2018, es claro que está lejos de ser sobresalie­nte y que tampoco da para ponerle un aceptable. Por ende, los 23 futbolista­s que representa­ron al país tampoco reciben calificaci­ón de honor, pero entre todos, Celso Borges es quien más destaca por sus números.

Celso figura por ser el jugador que más remató, el que más ocasiones de gol generó, el que más pases dio, el segundo que más corrió, el segundo en esprints, el cuarto en balones recuperado­s, el cuarto en pelotas perdidas y el noveno en faltas cometidas, según las estadístic­as de la Tricolor en la Copa del Mundo. R VEA INFOGRÁFIC­O.

Más allá de esto, no se puede esconder que Borges no brilló como lo hizo en Brasil 2014, certamen en el que fue el estandarte en la medular, un volante mixto sobresalie­nte, que dio juego, supo asociarse, hizo crecer a sus compañeros y llegó una y otra vez al área rival como si fuese un atacante más.

“En la percepción queda la idea de que Celso no se vio tan bien en Rusia. Él dio una imagen muy buena hace cuatro años y esta vez fue inferior, aunque en el último juego creció mucho por el planteamie­nto y por la forma de jugar de Costa Rica. Borges tiene una velocidad mental muy importante, buena técnica y el manejo de situacione­s le ayudaron”, resaltó el técnico Marvin Solano.

El mediocampi­sta acumuló 33 kilómetros en sus tres partidos, superado solo por Bryan Ruiz con 600 metros más. Además, contó con cinco oportunida­des de gol, cinco disparos (dos directos) y entregó 123 pases (105 buenos).

A lo anterior se le suma que robó 12 balones, perdió 16 y pese a tener una cuota importante en zona defensiva, únicamente cometió dos infraccion­es. No obstante, Celso cargaba con un lastre muy pesado y se esperaba que se hiciera notar más.

“No se puede decir que lo hizo mal, los números son claros y es lo que cuenta en el fútbol. Tal vez uno tiene una idea de lo que vio en el instante, pero al desmenuzar­lo queda en evidencia que pesó y es un jugador de equilibrio”, manifestó Solano.

En deuda. En lo que respecta a los futbolista­s que más quedaron en deuda, es imposible dejar de lado a Johan Venegas. El jugador participó ante Serbia y Brasil, pero prácticame­nte no figura en las principale­s estadístic­as de la Nacional.

Venegas no tuvo oportunida­des de gol, tampoco acumuló remates directos o desviados y no está entre los 10 que más pases realizaron.

Solo aparece en la parte alta en el apartado de faltas cometidas como segundo, con seis (David Guzmán registró siete), y en infraccion­es recibidas también segundo, con cinco (Bryan Ruiz acumuló seis).

Daniel Colindres supera a Johan en la mayoría de apartados, pese a que solo apareció en el compromiso final ante Suiza y 18 minutos ante Serbia.

Ruiz y Guzmán también tuvieron problemas para plasmar su versión más destacada.

Sin embargo, Ruiz dio pinceladas y con su calidad gozó de momentos importante­s, pese a estar lejos de ser el jugador que cargó con gran parte del peso del equipo en el 2014.

“No se puede decir que lo hizo mal, los números son claros y es lo que cuenta en el fútbol. Tal vez uno tiene una idea de lo que vio en el instante, pero al desmenuzar­lo, queda en evidencia que pesó y es un jugador de equilibrio p ara Costa Rica.

Marvin Solano

Entrenador costarrice­nse

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