Se aleja del peligro y la falta de alimentos
LOS CHILES. José Ángel Castro cruzó la frontera el 22 de julio, luego de tres días de travesía a partir del pueblo Tortuguero, en el Atlántico del país vecino.
Lo hizo acompañado por tres parientes directos y un par de amigos.
Dice que sentía que su vida estaba en peligro, pues los paramilitares orteguistas le habían advertido de que le iban a “rafaguear” su casa.
Además, tenía otro motivo poderoso. La comida estaba escaseando en la zona a consecuencia de que los paramilitares no permitían el tránsito a los camiones repartidores.
“Las mujeres se quejan de que no tienen arroz, frijoles, aceite, entre otros víveres. Tampoco artículos de limpieza como jabón y pasta dental.
”Es como si quisieran convertirnos en otra Venezuela. Antes de que se le peguen los males de Nicolás Maduro, lo que Daniel debe hacer es renunciar y permitir el adelantamiento de elecciones limpias”, señaló el muchacho de 20 años quien se quedó en Los Chiles trabajando.
Según dice, puede laborar como albañil, carpintero, en la ganadería o la agricultura. Lo que quiere, asegura, es ganarse la vida honestamente y en un ambiente tranquilo.
Espera que la situación en su país cambie pronto y confía en que “el régimen de terror” ya se esté derrumbando y pronto será la “caída”.
“No hay mal que dure 100 años ni cuerpo que lo resista”, concluyó el muchacho.
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