El ‘pura vida’ resonó en justa mundial de Química
→ Olimpiada de 10 días de duración tuvo lugar en la República Checa y Eslovaquia
La bandera de Costa Rica y su popular frase “pura vida”, alegraron la ceremonia de premiación de la Olimpiada Mundial de Química, que se realizó del 19 al 29 de julio en República Checa y Eslovaquia, gracias a la presencia del joven Sebastián Solís Vargas, quien se dejó una medalla de bronce.
El estudiante de 17 años, egresado del Colegio Científico de San Carlos, subió al escenario para recibir su premio, cargando la bandera nacional y un tucán de peluche llamado Rafita, el cual se convirtió en la mascota del equipo patrio. El muñeco llamó la atención de los maestros de ceremonia, quienes se acercaron para consultarle sobre el nombre del “animalito”.
Solís también aprovechó para explicar a la audiencia el significado de la frase “pura vida”, la cual fue repetida por los conductores del evento, una vez que el joven terminó de hablar.
La reñida competición reunió a colegiales de 83 países, quienes tuvieron que superar tres pruebas de laboratorio y ocho problemas teóricos.
“Estoy muy feliz y orgulloso de lo que logramos en Costa Rica, porque ha sido muchísimo el esfuerzo que hemos puesto todos los de la delegación para prepararnos para estos diez días que duró la Olimpiada y creo que valió la pena todo ese esfuerzo”, declaró el adolescente.
La delegación costarricense también la integraron los estudiantes José Pablo Vázquez Rojas, del Colegio Científico de San Ramón; Jafeth Méndez Gómez, egresado del Colegio Científico de Guanacaste, y Kevin Chinchilla Mora, egresado del Colegio Científico de Alajuela.
A su lado estuvieron los profesores mentores José Roberto Vega Baudrit, director del Laboratorio Nacional de Nanotecnología (Lanotec) del Centro Nacional de Alta Tecnología (CeNAT-Conare), y Manuel Sandoval Barrantes, de la Universidad Nacional (UNA).
El docente de la UNA destacó el alto nivel de las evaluaciones que los participantes tuvieron que superar.
“A juicio de los profesores mentores que participaron en la aprobación y traducción de estas pruebas, el examen realizado ha sido de los más difíciles en los últimos años. Fue determinante el poco tiempo otorgado a los estudiantes para resolver esta prueba (cinco horas en laboratorio y cinco en teoría)”, declaró Sandoval.
Con esta presea, Sebastián Solís continúa dejando en alto el nombre del país en competencias internacionales. A mediados de julio, el estudiante obtuvo por segunda vez consecutiva la medalla de oro en la Olimpiada Centroamericana y del Caribe de Química.
Los integrantes de la delegación llegarán al país hoy lunes en horas de la noche.
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