Trump pide cerrar caso de injerencia de Rusia en elecciones
Mandatario señala que ‘cacería de brujas’ podría ‘manchar’ más al país En Twitter, dijo que equipo investigador está ‘furioso’ por la derrota de Clinton
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pidió públicamente ayer el fin de la investigación que un fiscal especial conduce sobre la alegada injerencia de Rusia en las elecciones presidenciales del 2016.
“Es una situación terrible y el fiscal general Jeff Sessions debería interrumpir esta cacería de brujas ahora mismo, antes que manche aún más a nuestro país”, expresó Trump en Twitter, en referencia a la investigación que conduce el fiscal especial Robert Mueller.
Esta investigación busca determinar el alcance de la injerencia rusa en las elecciones del 2016 y –el aspecto más difícil para la Casa Blanca– si existió algún tipo de colusión entre funcionarios rusos y el comité de campaña de Trump.
La portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, aseguró que el mensaje del presidente no es una “orden”, sino que solo expresó su “opinión”.
“No es una orden. Es la opinión del presidente”, justificó Sanders en conferencia de prensa, para añadir que Trump efectivamente espera ver que esa investigación “llegue al fin”.
En una secuencia de mensajes, Trump atacó a Sessions, a Mueller, a su equipo investigador y también el proceso judicial contra el abogado Paul Manafort, quien en el 2016 condujo brevemente su campaña electoral y ahora está acusado por fraude fiscal y bancario.
Embuste. “La colusión de Rusia con la campaña de Trump, una de las más exitosas de la historia, es un EMBUSTE”, aseguró el mandatario en su Twitter.
En su serie de mensajes, Trump alegó que un informe que supuestamente establece la relación entre Trump y Rusia fue pagado por el opositor Partido Demócrata “y fue usado para comenzar esta cacería de brujas. ¡Es una vergüenza!”.
El propio Sessions se había
excusado de conducir esa investigación, en su condición de fiscal general, porque también mantuvo contactos no autorizados con funcionarios rusos después de las elecciones y antes de asumir el nuevo gobierno.
Esa recusación de Sessions provocó la ira de Trump y también motivó la nominación de Mueller como fiscal especial al frente del caso.
En sus mensajes del día, Trump recordó el caso de un agente del FBI y miembro del equipo investigador de Mueller que había enviado un mensaje a su novia durante las elecciones afirmando que impedirían el triunfo del empresario.
Para la Casa Blanca, el caso de ese agente confirma que la investigación de Mueller no pasa de ser una “cacería de brujas”.
Además, Trump sostiene que el equipo de investigadores está repleto de agentes del FBI “furiosos” por la derrota de la candidata del Partido Demócrata, Hillary Clinton.
Este miércoles, Trump reafirmó que Mueller tiene “un enorme conflicto y los 17 furiosos demócratas que están haciendo su trabajo sucio son una vergüenza” para el país.
Juicio por fraude. La diatriba de Trump de esta jornada ocurre un día después de que el abogado Paul Manafort, quien se desempeñó brevemente como jefe de su campaña en el 2016, estuviera siendo juzgado por fraude bancario y fiscal.
Manafort es acusado de haber escondido millonarios ingresos obtenidos como representante en Washington de los intereses del gobierno prorruso de Ucrania.
“Ha trabajado para mí por poco tiempo. ¿Porqué nadie me dijo que estaba bajo investigación? Los cargos no tienen nada que ver con colusión. Es todo UN TOTAL EMBUSTE”, aseguró el mandatario.