Alvarado urge tapar hueco en presupuesto para pagar salarios
El presidente de la República, Carlos Alvarado, advirtió de que si no se tapa el hueco de ¢600.000 millones que dejó el gobierno anterior en el presupuesto de este año, su administración no podrá pagar los salarios, ni los programas que tiene a cargo.
Alvarado pidió comprensión sobre la gravedad de la situación de liquidez que enfrenta el Estado, la cual obligó al Ejecutivo a presentarle al Congreso un plan de gastos extraordinario y acudir a hacer subastas internas de bonos estatales.
“Si no lo presentamos (el presupuesto), ¿cuál es la opción? No podemos dejar de honrar esos compromisos. Si no vamos a hacer subastas para recaudar en el mercado la liquidez para hacer los pagos que requiere el gobierno, si no hacemos eso, ¿cuál es la opción? ¿No pagar? ¿No pagar salarios? ¿No pagar programas?”, dijo el mandatario, a la salida de la misa por el día de la Virgen de los Ángeles que se efectuó en Cartago.
El Ministerio de Hacienda envió el presupuesto extraordinario a la Asamblea Legislativa, el pasado martes. La petición es que se aprueben ¢600.000 millones adicionales, para atender la amortización del pago de deuda interna.
Ese monto equivale al 1,73% del producto interno bruto (PIB), que el Banco Central estimó para este 2018.
Evasivas. Carlos Alvarado evadió responder si creía necesario que miembros del gabinete del exmandatario Luis Guillermo Solís sean llamados a cuentas.
Mientras el ministro de la Presidencia, Rodolfo Piza, alegó que “mirar al pasado no resuelve los problemas de hoy”.
“Soy amigo de resolver problemas, un gobierno debe concentrarse en la resolución de los problemas y no en la repartición de culpas. Hay que resolver los problemas que tiene el país y hay que hacerlo lo antes posible. Hubiéramos preferido no tener que mandar un presupuesto extraordinario, pero hay que resolver los problemas”, insistió.
Reforma fiscal. Alvarado por su parte, reiteró que la solución a los problemas de liquidez pase una reforma fiscal “solidaria y estructural”, y pidió una vez más a los diputados la aprobación del plan de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas.
Sobre el llamado de la Iglesia católica para que se apruebe pronto una reforma tributaria “basada en principios de solidaridad”, Alvarado dijo que por eso considera que debe hacerse un balance entre el impuesto de renta “y otros componentes” que incluye la iniciativa, así como avanzar con las acciones para contener el gasto público.
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