Ocho deficiencias
La escasa supervisión de la DIEE a la Junta Administrativa del Colegio Técnico Profesional (CTP) Fernando Volio Jiménez, en Cartago, provocó que ese centro educativo pagara ¢87 millones de más por mano de obra y materiales cuando realizaban mejoras.
El 95% (175 de 184) de los proyectos que entraron a la DIEE los ejecutaron y lideraron las Juntas de Educación por medio del proceso llamado abreviado. Ese sistema conlleva menos trámites y menos controles lo que explica por qué los proyectos desarrollados bajo ese esquema presenten sobreprecios, retrasos, construcciones nuevas con alto deterioro u obras inconclusas.
El MEP utilizó casi ¢1.000 millones, destinados a la construcción de nuevas escuelas y colegios, para pagar los castigos que el Banco Interamericano de Desarrollo le impuso por no ejecutar a tiempo los $167,5 millones, aportados por el propio organismo financiero, para levantar 80 centros educativos y 23 canchas techadas.
Ingenieros del MEP descuidaron las construcciones en escuelas porque el 67% de los carros para giras estaban dañados.
Un total de 12 ingenieros y arquitectos privados acapararon los millonarios contratos de supervisión de la construcción de centros educativos del MEP durante los últimos tres años.
Actualmente hay 662 centros educativos con órdenes sanitarias lo cual representa un crecimiento del 50,45% (222 casos más) respecto a las 440 instituciones que había en esa condición en marzo del 2017.
La Defensoría de los Habitantes denunció a inicios de año el serio deterioro de los centros educativos y los problemas de gestión de la DIEE.
De las 145 escuelas y colegios dañados por el terremoto de setiembre del 2012, la DIEE aún no ha podido terminar de reconstruir 65 a enero del 2018.