3 provincias se disputan llegada del tico 5 mills.
→ La nueva previsión estima que ese niño o niña nacería el 1.° de setiembre
Se espera que su llanto se escuche por primera vez alrededor de las 9:27 de la noche del sábado 1.° de setiembre, en algún hospital de San José, Cartago o Heredia, las tres provincias con más posibilidades de recibir a quien se convertirá en el tico 5 millones.
Ese niño o niña podría nacer en el Hospital Nacional de las Mujeres, en San José; el Max Peralta, de Cartago, o el San Vicente de Paúl, en Heredia, pues es ahí donde se ha registrado la mayor parte de los nacimientos, de acuerdo con datos aportados por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).
Esos datos toman como base los partos registrados durante el primer trimestre del 2018, cuando nacieron 15.995 niños en todos los centros públicos y privados del país.
Los tres hospitales con más nacimientos pertenecen a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) y son, según el INEC:
kEl Nacional de las Mujeres (antigua Maternidad Carit), que registró, en el primer trimestre, 1.287 bebés, un 8% del total.
k El Max Peralta, con 1.188 alumbramientos (7,4%).
kEl San Vicente de Paúl, con 1.182 bebés nacidos entre enero y marzo (7,4%).
A estos centros les siguen el San Rafael de Alajuela (1.144 nacimientos; 7,2% del total); el San Juan de Dios, en San José (1.103; 6,9%),y el San Carlos, en Alajuela (915; 5,7%).
Entre tres hospitales privados (CIMA, Católica y Bíblica), se reportan 689 nacimientos.
Según el INEC, solo 95 bebés nacieron en sus casas y 222 aparecen como nacidos en “el resto de instituciones”, que no se especifican.
La baja en el número de nacimientos, que por primera vez en casi cuatro décadas bajó de 70.000 en el 2017, ha postergado la llegada al país del habitante 5 millones.
Inicialmente, se esperaba su arribo para el 25 de marzo. Luego, se habló del 16 de julio y ahora se espera que se cumpla la proyección del 1.° de setiembre. Esto último, tras confirmarse que en el primer trimestre del 2018 se mantuvo la tendencia a la baja en el número de partos.
Las proyecciones demográficas solo toman como base los nacimientos y las defunciones, no el efecto de la migración. Los especialistas hablan, entonces, de “saldo migratorio cero”.
17 años después. La caída en la tasa de fertilidad entre las mujeres en edad reproductiva y el hecho de que Costa Rica llegara a la tasa de reemplazo antes de lo previsto (hoy, es menos de 2 hijos por mujer en edad reproductiva), son algunas de las razones que explican por qué el país ha tardado 17 años y medio en alcanzar su siguiente millón de habitantes. El bebé 4 millones vio la luz en Limón el 24 de febrero del 2001.
A todo este comportamiento demográfico, se suma el envejecimiento de la población. Casi un 10% de los costarricenses supera los 60 años, una cifra que se triplicará en próximas décadas.
La llegada del niño o niña cinco millones representa un reto en lo social y económico, pues tendrá un impacto en todos los servicios que se le proveerán a esta población.
La estructura de la población costarricense, por sexo y edad, ya es otra y se mantiene en constante cambio.
Todo un desafío. De hecho, se prevé que para el 2030, habrá más gente mayor a los 65 años que población menor a los 15.
Esto tiene un impacto en todas las áreas del desarrollo, que los gobernantes actuales y futuros deberían considerar.
“El habitante 5 millones sí será un evento para un país tan chiquito como el nuestro. El nuevo gobierno se tiene que preparar con una política de sensibilización, porque esto no es responsabilidad de una única institución, como la Caja (Costarricense de Seguro Social), o de los servicios de salud. Esto les compete a todos”, advirtió en enero anterior Olga Araya, demógrafa del INEC.
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