Congojas para llegar al aeropuerto
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En repetidas ocasiones el ministro de Seguridad, Michael Soto, y el mandatario Carlos Alvarado, advirtieron de que no se tolerarían bloqueos y alteraciones al orden público.
No obstante, este martes, Soto descartó utilizar cualquier tipo de medidas adicionales al diálogo, para habilitar las carreteras.
Durante los dos días de protesta, los manifestantes han realizado bloqueos e interrupciones temporales del tránsito en prácticamente todo el país.
El caso más grave se dio el lunes, cuando un grupo de manifestantes mantuvo cerrado el paso por la Interamericana Norte durante 15 horas.
En tanto, el martes los huelguistas tuvieron cerrado durante al menos tres horas el paso sobre la ruta 32, en la entrada a la Terminal de Contenedores de Moín.
Otra de las afectaciones importantes se registró en horas de la mañana cerca del Aeropuerto Internacional Juan Santamaría, donde incluso los turistas tuvieron que caminar hasta dos kilómetros con sus equipajes, situación a la que el gestor de la terminal respondió facilitando microbuses para trasladarlos.
Empero, Soto insistió que la decisión de no utilizar otras medidas más que el diálogo fue una determinación “colegiada”, en la que estuvieron de acuerdo todos los ministros.
“De ninguna manera queremos llegar a usar agentes químicos como gases; estamos optando por la negociación con las personas, hacerles ver que se está afectando a otros ciudadanos, a turistas y la economía del país”, dijo.
“No creemos que esto se deba resolver a la fuerza, cuando se llegue a ese tipo de circunstancias van a haber personas heridas de ambos grupos, de la Policía y de los manifestantes”, agregó Soto.
Sin embargo, en horas de la noche, la Policía reportó que debió actuar ante un grupo de vándalos que incendió el cabezal de un furgón, que llevaba bobinas de papel, en el barrio Limón 2000, en la provincia caribeña. No se aclaró si los causantes se relacionan con la huelga.
De vuelta al trabajo. Por otro lado, Casa Presidencial, anunció también que miles de funcionarios que se encontraban en huelga el lunes, regresaron a sus trabajos este martes.
La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) fue la institución donde más empleados levantaron el movimiento.
De 13.356 trabajadores que se contaban el lunes en paro, solo quedaron 6.664, lo que significa que más del 50% volvió, según datos que aportó la institución.
En total, según Presidencia, el lunes había 18.716 funcionarios de 40 instituciones (sin contar el Ministerio de Educación Pública) en huelga. Para este martes a las 3:30 p. m. quedaban 10.968 en paro.
Aunque no detallaron cifras del número de citas, la Caja informó que este martes se realizaron el 63,3% de consultas, así como el 37,10% de las cirugías.
Eso sí, la Caja además debió echar mano del fondo para emergencias, con el fin de apaciguar los efectos de la huelga.
El lunes se usaron entre ¢20 millones y ¢30 millones para atender gastos varios.
El gerente médico recalcó que el plan de contingencia no se preparó únicamente para aguantar una semana de huelga, sino lo que sea necesario.
Por su parte, el presidente de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope), Alejandro Muñoz, aseguró que el abastecimiento de combustibles se ha mantenido a pesar de bloqueos en el plantel del Alto de Ochomogo, Cartago (único establecimiento donde se está expendiendo hidrocarburos).
En las aulas. Donde los números no son positivos es en el ámbito educativo, pues 2.088 escuelas y colegios del país siguieron cerrados por la huelga.
Ese porcentaje representa el 48% de los 4.320 centros educativos que reportaron al Ministerio de Educación Pública (MEP) el estado en el que se encontraban en el segundo día de protestas. En total en el país hay 5.321 centros educativos.
No obstante, según el ministro de Educación, Édgar Mora, el 52% de los centros educativos estuvieron abiertos.
El mayor porcentaje de centros cerrados se encuentra en la Dirección Regional zona Norte-Norte (95%) y Grande de Térraba (93%).
En tanto, hay direcciones donde se ha dado poca afectación como Cartago y San José (Central, norte y Oeste) donde el porcentaje de centros cerrados oscila entre el 4% y 12%.
Mora espera que el número de centros abiertos aumente en los próximos días.
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