Cierre de carreteras ahuyenta el turismo
‘Tenemos pérdidas’. Empresa de viajes debió cerrar en Guanacaste por cancelaciones ‘Turistas con temor’. Visitación al Rincón de la Vieja y el Pacuare cayó en un 100% Golpe a guías turísticos. Solo Monteverde perdió 500 reservaciones para hacer ‘tours’
“Hemos tenido cancelaciones de todos los tours por temor de los turistas”, reveló Fernando Madrigal, quien maneja Sensoría, un parque temático natural con bosques y cataratas en las faldas del volcán Rincón de la Vieja, en Guanacaste.
“Tenemos puras pérdidas y, con los tres tours que sí hubo (la semana pasada), desgraciadamente el regreso de los clientes a sus hoteles se tardó seis horas. Todo mal. Nada bueno para ellos, ni para nosotros”, se quejó Dicgiana Gómez, microempresaria y touroperadora de Mardigi Tours, que ofrece paseos en Guanacaste y que, dada la falta de turistas por las protestas de los huelguistas, decidió no hacer más viajes hasta que el paro acabe.
Trevor Bernard, del hotel Best Western Tamarindo Vista Villas, también en Guanacaste, reveló que desde que comenzó la huelga de un sector de los empleados públicos, el lunes 10 de setiembre, sufrieron un 21% de cancelaciones en reservas: “Representan miles de dólares a la empresa entre consumos y tours de los huéspedes” en esa zona de playa del Pacífico.
Al otro lado del país, en el Caribe, otra compañía de viajes padece las consecuencias de las protestas: “Cuando más afectados nos vimos fue el martes, con los bloqueos en Limón porque vino un crucero (el Carnival Miracle, con 2.031 pasajeros) y los excursionistas no bajaron a tierra a consumir productos y servicios por esa huelga”, dijo Nicolás Staton, gerente general de Rainforest Adventures.
Roena Brown, del Caribbean Kalisi Restaurant, en puerto Limón, también afronta los efectos: “Las ventas se nos cayeron 70% por falta de turistas y agentes vendedores a la zona de Limón debido a la huelga”.
La reserva ecológica Monteverde, en Puntarenas, sufrió 500 cancelaciones de tours con pérdidas que la cámara de turismo local calcula en ¢119 millones y “hay lugares con 100% de cancelaciones, como es el río Pacuare, en Limón, y en el Rincón de la Vieja es algo similar. Hay una afectación de imagen del país”, advirtió Javier Pacheco, vicepresidente de la Cámara Nacional de Turismo (Canatur). Indicó que solo por la huelga, las agencias de viajes que ofrecen servicios de paseos, alojamientos y transporte han sufrido una caída del 50% en las reservaciones. En el caso de los turistas extranjeros, dijo que no cancelan su viaje y solo cambian de destino, es decir, se van a otro país.
Empleos afectados. Ese es parte del recuento de los perjuicios que, hasta ahora, provoca en el sector turismo el movimiento de empleados públicos contra la reforma fiscal que tramitan los diputados.
Pacheco advirtió de que el turismo representa el 27% de la fuerza laboral del país (600.000 personas) entre empleo directo (150.000 puestos) e indirecto (450.000) y el 58% de los cargos son ocupados por mujeres.
El turismo genera el 40% de divisas del país y es de las pocas industrias que da trabajo en todo estrato social, recalcó Pacheco. Esto, porque cada turista, en promedio, gasta unos $80 u $85 por día.
El promedio de estadía es de 12 días, durante los cuales le dejan al país $1.300 en gastos de hotel, viajes, alimentos y otros.
En cadena. En turismo hay un encadenamiento de valor: si el crucero no llega, no baja el visitante y si no lo hace, tampoco compra artesanías, ni consume servicios, ni contrata tours, ni ingresa en los parques nacionales, explicó el dirigente de Canatur, en alusión al crucero Celebrity Infinity, que este lunes tenía prevista una escala en Puntarenas, con sus 3.500 pasajeros, pero decidió pasar de largo y detenerse hasta Panamá.
Esto ocurrió por temor a que los turistas que bajaran se quedaran atrapados en los bloqueos y no pudieran regresar a tiempo para el zarpe de la nave. Solo con esta cancelación, se estima que se perdieron ¢130 millones en ingresos.
“Hacemos un llamado fuerte y vehemente para que el Ejecutivo asegure el libre transporte y circulación de forma tal que los costarricenses podamos trabajar así como lo hacen los huelguistas que se están excediendo”, manifestó Gonzalo Delgado, presidente de la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado (Uccaep).
“No es justo pensar en unos pocos. Solo un 1% en este caso y el resto de la población sin poder ejercer su voluntad”, añadió.
Javier Pacheco advirtió de que si no logran llenar los hoteles y hacer que el turista llegue y haga tours, habrá “desempleo”.
“El desabastecimiento de combustible en Guanacaste ha sido un factor importantísimo para estas cancelaciones. La imagen del país ante el turismo extranjero ha sido impactante, mucha gente está queriendo devolverse a sus países", sostuvo Fernando Madrigal Anderson, del parque Sensoría, junto al Rincón de la Vieja.
Agregó que la sostenibilidad de todos los negocios turísticos del país está en juego porque “el sector turístico es muy vulnerable ante estas situaciones”.
Dicgiana Gómez, que tiene su empresa de tours en Guanacaste, dijo que se optó por no hacer más salidas hasta que se deponga la huelga, “porque así no es posible trabajar”. Relató que quedó atrapada cuatro horas en una presa en Barranca con turistas a su cargo.
“Es ilógico esto de las presas, esos bloqueos golpean, sobre todo, a personas con diabetes, con presión alta, con limitaciones físicas, a pleno sol y sin servicios sanitarios, que vienen más bien a descansar y disfrutar el país”, se quejó.
Nicolás Staton, gerente ge-
neral de Rainforest Adventures, con oficinas en San José, afirmó que “esto afecta gravemente la imagen del país y destroza una industria que genera divisas y empleos en el país”.
Trevor Bernard, del hotel Best Western Tamarindo Vista Villas, detalló que en el caso de ellos, las cancelaciones fueron de 29 estadías de una noche y que las pérdidas se extienden a las actividades conexas de los turistas que los visitan.
Roena Brown, la dueña del restaurante Caribbean Kalisi, dijo que ella tuvo que modificar horarios por los disturbios que se han presentado durante las noches. “Como limonenses, apoyamos las luchas de nuestro pueblo, pero no apoyamos los actos de vandalismo. Le pedimos a Gobierno y sindicalistas que se sienten ya a conversar”.
Golpe al comercio. Pero, no solo el turismo se ve afectado. El comercio también y así lo hizo saber la Cámara de Comercio de Costa Rica al indicar que un 40% de trabajadores del sector comercio perciben un salario variable. Es decir, “un salario base más comisión por ventas”.
Según el gremio, esta huelga afecta los ingresos de 104.000 trabajadores debido al cierre de comercios o disminución en las ventas como consecuencia de la protesta que impide a los clientes llegar a los puntos de venta o los desestimula a movilizarse por temor a quedarse en un bloqueo u otro tipo de reserva por causa de la huelga.
La Cámara estima que esa situación de cierres en vías principales podría generar pérdidas para los comercios por unos ¢17.500 millones por semana.
“Instamos a las autoridades de Gobierno a defender el derecho de la mayoría de la población a continuar aportando a la economía”, lanzó la Cámara en su comunicado.