Jóvenes sordas usan la robótica para alcanzar un mejor futuro
Fundación Omar Dengo les impartió un taller gratuito de cinco sábados Desarrollan visión estratégica, liderazgo pensamiento lógico y mejor comunicación
Priscilla Bonilla tiene 18 años, está aprendiendo técnicas de repostería y sueña con, algún día, poder aplicar a ese oficio los conocimientos que acaba de adquirir en robótica.
Pero hay algo más: ella es una de las 12 jóvenes sordas de entre 13 y 18 años que, durante cinco sábados, adquirió destrezas en ese campo, gracias a un taller especializado llamado Principios de Programación y Construcción. Lo impartió la Fundación Omar Dengo (FOD), en alianza con la empresa Motorola Solutions Foundation, como parte del programa Young Girls.
El programa procura ofrecer a jóvenes, sobre todo de zonas vulnerables, la posibilidad de explorar diversas tecnologías para el desarrollo de productos personalizados digitales.
Mas esa no es la única contribución, la idea es que estas muchachas también puedan generar “habilidades como liderazgo, comunicación, visión estratégica y pensamiento lógico, y motivar posibles vocaciones ingenieriles”, informó la Fundación Omar Dengo.
Después de la capacitación, Bonilla ha hecho proyecciones para dentro de un año: “Empezaré a estudiar para sacar mi bachillerato, todas las materias y así obtener el título”. Además, ahora visualiza la robótica como algo que le ayudará a distinguir sus creaciones en el futuro. “Podría montar los queques en bases que se muevan, inspirados en la robótica”, aseguró.
Curso adaptado. Para impartir el curso, la FOD creó una base de materiales adaptados a las necesidades de las muchachas. Estos permitieron a Neftalí Mena, profesor de robótica e informática educativa, explicarles términos técnicos que son difíciles de traducir al Lenguaje de Señas Costarricense (Lesco).
“Se creó una base de videos, donde se explican algunas palabras técnicas como motor, engranajes o ejes, entre otros muchos términos que manejamos en programación, como bucles. Los materiales que se tenían para talleres anteriores fueron adaptados para la población sorda”, explicó Mena.
Las muchachas también contaron con un intérprete de Lesco durante las sesiones.
Mena destacó que las jóvenes tienen muchas ganas de aprender y gran capacidad. Además de “carisma y entusiasmo por tratar de resolver lo que se les propone en el curso”.
El programa Young Girls, capacitó a 340 jóvenes de zonas rurales en talleres de robótica y programación el año anterior, y para este 2018 espera beneficiar a 352 jóvenes más.
Ana Lourdes Acuña, de la Fundación Omar Dengo, aseguró que estos talleres también ofrecen capacitación en áreas como programación y animación digital.
El aporte a la vida de las muchachas que han pasado por estos talleres es mucho, pues, según reconoció el profesor Neftalí Mena, “sin importar diferencias sociales, discapacidades o situación económica, los cursos ayudan a que los estudiantes se incorporen a la sociedad”.
Dos beneficiadas. Alexa Navas, de 14 años y estudiante del Colegio Napoleón Quesada, es otra de las participado.
Ella, además de valorar los conocimientos adquiridos, destaca que “estas capacitaciones nos ayudan a desenvolvernos con nuevas personas, a apren- der y a comunicarnos. Aquí nos ayudamos entre todas”.
Kristel Herrera, otra de las beneficiadas con este taller, se proyecta en el futuro como una profesora que les enseñe robótica a otros acerca.
Quien se sienta identificado y desee apoyar esta causa, puede visitar el sitio www.globalgiving.com/search y escribir el número de proyecto 35109 para ingresar a la iniciativa de la FOD y realizar su donación. ■