País tiene una legionaria en liga profesional de Israel
Fabiola Sánchez tiene 25 años; sin embargo, ya ha jugado en el fútbol femenino estadounidense, japonés y escocés; además, desde hace una temporada explora una cultura muy diferente y rica: la israelí.
La costarricense forma parte del WFC Ramat Hasharon de la liga profesional de fútbol israelí, plantel al que llegó por recomendación de una amiga con la que compartió en el fútbol universitario de los Estados Unidos.
Sánchez, siempre deseosa de aventura, no dudó dos veces en aceptar el reto y vincularse al Ramat Hasharon, aunque su madre, Seidy Jiménez, sí tuvo inquietudes.
“Por supuesto que al inicio uno siente preocupación y temor porque, lastimosamente, acá solo se informa de lo malo de Israel, pero ella es tan ubicada, que nosotros confiamos y, al final, ella misma nos tranquilizó y dijo: ‘Nada es como sale en las noticias, aquí es muy tranquilo y seguro’”, recordó su mamá.
La futbolista, por su parte, es clara: ella es feliz en Israel.
“Yo entiendo todo lo que sale, pero la verdad es que yo he visto un Israel muy diferente. Puedo decir que es un país muy seguro, amable y de gran atención para la persona extranjera”, declaró.
Sánchez se ha acomodado a los diferentes retos que implica ser legionaria: comida, idioma y adaptación en general.
La costarricense señaló que su principal preocupación cuando aceptó la oportunidad, era cómo se comunicaría con sus compañeras.
La jugadora nacional habla inglés desde su paso futbolístico por Estados Unidos. Empero, siempre existía la curiosidad de saber si esta lengua era bien recibida en Israel.
“Tenía cierto temor con el idioma, pero ahí lo he sorteado. En la primera experiencia me llamó mucho la atención que todos hablan inglés. Eso me salvó bastante. Quiero aprender el hebreo, de momento lo que sé es lo básico: izquierda, derecha, adelante, atrás... Sí me interesa mucho aprender el idioma porque me parece muy atractivo”, profundizó.
En cuanto a la comida, la gran dificultad radicó en encontrar su fruta favorita: la sandía.
En Israel, esta fruta solo se consigue en una temporada, por lo que le es imposible comerla durante todo el año.
“Yo cocino y preparo comida como si estuviera en Costa Rica, conseguí frijoles en tarro, tam- bién arroz, lo normal. Es difícil encontrar cosas más específicas como plátano maduro o la sandía, pero de igual forma, hay platillos muy ricos”, expresó.
Por ejemplo, a la jugadora se le hace la boca agua cuando recuerda el plato llamado Shakshuka, por su delicioso sabor.
Esta comida se compone de una salsa de tomate, especies y huevos. “Es sencillamente delicioso”, reiteró.
Entre las facilidades que le dio la escuadra a la futbolista nacional están transporte y casa, además de que le ayudan con la alimentación.
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