Un aplauso para el Cartaginés
Cartaginés antepuso la honradez, la dignidad deportiva y el juego limpio por sobre la idea de sacarse un clavo y eliminar al Team.
Los brumosos tenían razones de sobra para alinear a su equipo de alto rendimiento. Hace apenas unos torneos atrás, previo a un enfrentamiento ante los brumosos, la feligresía florense llevó ataudes de cartón a la gradería del Rosabal y cantó a todo galillo “Cartago huele a muerto”.
En otra ocasión, un aficionado rojiamarillo se vistió de muñeco en el estadio Fello Meza. Estos gestos de fanatismo solo alimentan la rivalidad y, por qué no decirlo, el rencor.
Un sector de la afición brumosa hubiera aplaudido que el entrenador Martín Arriola mandara a la cancha a su equipo B ante Pérez Zeledón.
Los débiles estatutos de Unafut no podrían confirmar que ese “alto rendimiento” que Arriola optó por alinear, al final “se dejó ganar” para que avanzara el equipo sureño.
Cartaginés ni siquiera tenía que pedirle a sus juveniles que perdieran. Aun cuando entraran al campo como toro en redondel, Pérez se habría impuesto sin problema.
Este es el valor del gesto deportivo de Cartaginés. No importa cuántas humillaciones recibió con anterioridad.
Por encima de cualquier circunstancia están los valores, y los valores no se negocian en ningún momento.
Cada vez es más común en nuestro fútbol que los resultados se coloquen por encima de todo, no importa el precio.
Cartaginés demostró que no siempre es así. Primero está la dignidad deportiva.
En una ocasión le comenté a Cristian Brenes, periodista de La Nación que se encarga de la cobertura diaria del club blanquiazul, que la provincia de Cartago no merece un equipo con tantos fracasos.
Es decir, en Cartago hay profesionales destacados en todas las áreas, excelentes ciclistas, atletas y, en general, buenos deportistas.
No merecía la provincia ser representada por un equipo tan perdedor...
Me equivoqué. El club sí representa los mejores valores de la provincia: la honestidad, la dignidad y el juego limpio.
Después de lo sucedido en la última jornada, sería un gesto muy elegante de parte del timonel de Herediano, Jafet Soto, que les agradezca a los brumosos por jugar limpio.
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Recuperación. Su primer entrenamiento con la Mayor se dio a eso de las 9:30 a. m., con un trabajo regenerativo que incluyó trote al lado de Allan Cruz, José Miguel Cubero y Randall Leal.
Después se dirigió al camerino, se alistó y, a la 1 p. m., se trasladó con el grupo al aeropuerto Juan Santamaría, donde la Sele tomó un vuelo hacia Santiago de Chile.