La Nacion (Costa Rica)

Pistolas y revólveres legales también surten a criminales

- Gustavo Arias R. gustavo.arias@nacion.com

El paso de la formalidad a la clandestin­idad, es decir, armas que estuvieron inscritas pero ahora se desconoce su paradero y son utilizadas para delinquir, es otro fenómeno que alimenta el mercado de armas para la criminalid­ad.

Eso ocurre, principalm­ente, por robo o extravío, el uso de testaferro­s, o bien, por problemas de fiscalizac­ión de las empresas de seguridad privada.

Incluso, el Ministerio de Seguridad remarca la gravedad del fenómeno con cifras del director general de Armamento, William Hidalgo.

Esa unidad tiene bajo custodia 9.805 armas relacionad­as con algún delito, de las cuales 1.975 (20%) tienen la serie borrada, lo cual impide rastrear su procedenci­a.

Hay un grupo de 2.223 armas que están inscritas, pero solo 105 fueron reportadas como robadas o extraviada­s.

El resto, 5.607, tienen la serie visible, pero no existe ningún registro sobre su ingreso al país ni vínculo con algún nacional. Ellas representa­n el 57% de las armas en manos de Seguridad Pública.

Además, hay 495 armas bajo custodia que están relacionad­as con el delito de homicidio. De ellas, solo 183 estaban inscritas, es decir un 37%.

“Las armas legales están impactando en la incidencia criminal del país definitiva­mente y sobre todo en el tema de los homicidios”, dijo el viceminist­ro de Seguridad, Eduardo Solano, quien aseguró que las reformas promovidas por el Gobierno a la ley de armas disminuirá­n también ese problema.

Solano defiende, en particular, la propuesta de que solo se pueda tener un arma y no tres, como en la actualidad.

Insiste en que la medida sí traería una mejora, porque además de limitar el número de armas en las calles, también pondría freno al uso de testaferro­s para adquirir armas legales y después usarlas para delinquir.

No obstante, el gerente del polígono Centro de Defensa Civil (CDC), José Ojeda, considera que dicha medida no evitaría el paso de la legalidad a la clandestin­idad, porque no golpea al narcotráfi­co.

Según datos de Seguridad, 3.600 personas tienen inscritas tres armas de fuego, cada una.

Seguridad privada. Otro factor que incide en la ilegalidad son las empresas de seguridad privada. De hecho, las autoridade­s Poner límites

“LAS ARMAS LEGALES ESTÁN IMPACTANDO EN LA INCIDENCIA CRIMINAL DEL PAÍS DEFINITIVA­MENTE Y SOBRE TODO EN EL TEMA DE LOS HOMICIDIOS (...). UN ARMA POR PERSONA ES MÁS QUE SUFICIENTE PARA DEFENDER SU VIDA, TAN ES ASÍ QUE LOS

’’ POLICÍAS SOLO TIENEN UNA. Eduardo

Solano

Viceminist­ro de Seguridad

desconocen dónde están más de 8.000 armas de fuego inscritas a nombre de estas compañías.

Debido a un débil control, en el limbo permanecen 7.000 artefactos de empresas a las que se les quitaron los permisos y otros 1.636 de compañías que dejaron de laborar en los últimos dos años.

Para agosto del 2018, había en el país 724 empresas de seguridad inscritas, un 37% más que en 2014, cuando esa cifra era de 528. Actualment­e, hay 196 firmas más que hace cuatro años.

La cifra de oficiales de seguridad también va al alza, pues pasó de 24.190 en el 2014 a 29.216 a mediados de este año.

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JOSÉ CORDERO El viceminist­ro de Seguridad, Eduardo Solano, aboga por un proyecto de ley que propone que cada persona solo pueda tener un arma inscrita y no tres, como en la actualidad.

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